Lleida, con mucho Orgullo

Lleida volvió a volcarse ayer en la celebración del Día Internacional de las Personas LGTBI, un movimiento que comenzó en 1969 con los disturbios de Stonewall, en Nueva York, y que a día de hoy sigue luchando en las calles. Si bien la capital del Segrià acogerá el sábado una gran fiesta por la liberación sexual y de género que tendrá como colofón la ya tradicional marcha del Orgullo (a las 19.30 horas desde la plaza Ricard Viñes), el patio del antiguo convento de Santa Clara fue ayer el escenario del acto institucional de la asociación Colors de Ponent, la Paeria y la Diputación, que subrayaron su compromiso para alcanzar la igualdad real y efectiva del colectivo en todos los ámbitos de la sociedad. Además de denunciar un preocupante aumento de los discursos de odio y de las agresiones contra las personas LGTBIQ+, la entidad premió al proyecto Viladona de Vilanova de Bellpuig; Josefina Jornet, impulsora en 2007 de una delegación de la AMPGIL (Asociación de Madres y Padres con hijos LGTBI) en Lleida; y Elena Rojo, técnica del área de Juventud del ayuntamiento de Torrefarrera.

Tàrrega fue otro de los municipios leridanos que se sumó a la conmemoración con la lectura de un manifiesto por parte de representantes de los diferentes grupos que conforman el arco consistorial, encabazados por la alcaldesa, Alba Pijuan, así como representantes de entidades locales y el presidente del consell del Urgell, Gerard Balcells. El Govern, que recibió a portavoces del colectivo en el Palau de la Generalitat, anunció que destinará 13 millones a la contratación de 113 profesionales para los servicios de atención integral LGTBI+ para el 2022-2025.