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Ropa de Sanfermines: que levante la mano el que no haya engordado en pandemia
España es el país europeo donde más ciudadanos dicen haber ganado peso (38 %), seguido de Italia (35 %).
Seamos sinceros: hemos engordado en pandemia, primero durante el confinamiento en casa y después, ya en libertad, celebrándolo en restaurantes como si no hubiera un mañana. Y esos kilos de más han hecho que nos lancemos en masa a las tiendas para renovar la ropa blanca para Sanfermines. Malo para la salud, bueno para los comerciantes. Y no es cosa de broma. Según un estudio de la plataforma de salud Ipsos, desde el inicio de la pandemia y hasta diciembre de 2021, los españoles habían engordado de media 5,7 kilos. España es el país europeo donde más ciudadanos dicen haber ganado peso (38 %), seguido de Italia (35 %).
"LA GENTE HA SUBIDO DE TALLA"
La tienda Ortega, en la calle Mayor de Pamplona, lleva más de un siglo renovando el atuendo de los pamplonicas. Sus dependientes y dependientas tienen muy claro que la pandemia de covid-19 ha pasado factura a las barrigas de muchos de sus clientes. "Se nota sobre todo por el tema de la pandemia, que hemos estado dos años sin Sanfermines y ya sabemos todos que la ropa blanca se amarillea, y se ha notado también que en esos dos años mucha gente ha subido de talla, y por eso se está vendiendo mucha ropa blanca este año", ha explicado a Efe Beatriz, dependienta del establecimiento.
En casa Ortega, el precio de vestirse con el atuendo de pamplonica depende de lo exquisito que se ponga el cliente. El pack más económico, con la camiseta básica y el pantalón, aparte del pañuelo y la faja roja, sale por unos razonables 22 euros. "Luego para los que quieren ir más vestiditos, con camisa, subiríamos a 37 o 40 euros", ha comentado. Normalmente, ha apuntado, los jóvenes tienden más a la camiseta o polo blanco y "la gente que sale por el día ya se pone más la camisa".
TENDENCIAS SANFERMINERAS EN ROPA INTERIOR
Pero también en las prendas que llevamos debajo de la de pamplonica, la ropa interior, hay tendencias, como no podría ser de otra manera. En el comercio Medina, también en la calle Mayor de Pamplona, llevan desde 1920 surtiendo de bragas, sujetadores y calzoncillos a pamplonesas y pamploneses. Amaya, dependienta de la tienda, ha indicado a Efe que "Sí que se nota que se vende más lencería de cara a San Fermín". Las dependientas intentan vender el color carne, "que es el que hace el trabajo de que no se note con las camisetas blancas, pero no gusta y la gente pide que no sea tan feo".
El rojo, a pesar de ser un color tan sanferminero, no se pide: "Eso suele ser de cara a final de año", ha comentado Amaya, quien ha destacado que, para los hombres, intentan "que se quiten los dibujos en el calzoncillo porque, si no, se les nota mucho" con el pantalón blanco. Su compañera Ascen ha destacado que la gente joven "casi siempre tira por algo sencillito, que no se note, que no se marque, pero ya a las que vamos cumpliendo años nos gusta enseñar un poco el escote, el tirante mono, con alguna puntillita, pero generalmente se busca algo sencillo más que recargado, porque no quieren que se marque ni se transparente".
LA FÓRMULA MÁGICA: AGUA, JABÓN Y LEJÍA
¿Y qué hacer si, como suele ocurrir, tras un día de fiesta uno llega a casa como un 'ecce homo', manchado de vino y otros líquidos de difícil catalogación" En Tintorería Baztán, en la calle Aoiz de Pamplona, tienen la respuesta: "Agua, jabón y lejía. A fuerza de darle, sale todo". "Hay gente que le pone Coca-Cola y cosas de estas, pero, donde esté la lejía, que se quite todo. Y jabón, el Chimbo de toda la vida, un programa un poco alto en la lavadora, a 40 o incluso 60 grados", ha afirmado la dependienta de la tintorería.
También tiene su truco guardar la ropa de San Fermín cuando acaban las fiestas para que siga siendo blanca, que es de lo que se trata. Tras lavarla, "como no se va a poner en el resto del año, se guarda sin planchar porque la vaporización puede dejar manchas amarillas, y siempre en algún sitio que no le dé la luz, como un altillo o una caja, para que al año siguiente salga impecable". Es mejor no guardarla en una bolsa de plástico "para que la ropa transpire, es mejor una sábana vieja o una caja de cartón, como los vestidos de novia, manteles y comuniones, que también se guardan así", ha recomendado la dependienta.