Salud pone en marcha un programa de visitas a domicilio dos veces por semana para menores con problemas de salud mental
El departamento contratará a 140 educadores sociales para reforzar los centros de salud mental infantil y juvenil (CSMIJ)
El Departamento de Salud ha puesto en marcha un nuevo programa de atención a niños y jóvenes que tengan una crisis de salud mental: recibirán dos o tres visitas semanales en casa, o allí donde residan, de profesionales como psiquiatras, educadores sociales y terapeutas educacionales. El programa se activará cuando un paciente ya conocido por el sistema de salud tenga una crisis o un brote de la enfermedad de especial intensidad y durará dos meses. Pasado este tiempo se evaluará si hay que prorrogarlo. Salud ha explicado que la diferencia con lo que se hacía hasta ahora serán las visitas domiciliarias y la incorporación a los equipos asistenciales de perfiles profesionales como educadores sociales o terapeutas educacionales, de los que contratará 140.
“En el sistema había un agujero. Había muy profesional clínico pero faltaban profesionales que pudieran intervenir en el entorno natural del enfermo como los educadores sociales”. Así ha definido la psiquiatra infantil Montserrat Dolz el punto de partida del nuevo programa de atención a crisis de salud mental que ha explicado el Departamento de Salud. Lo ha hecho a la rueda de prensa que la consejería|conselleria ha celebrado en los jardines del Palau Robert.
Ella misma, jefa del Área de Salud Mental de Sant Joan de Déu, ha explicado que hasta ahora, cuando un niño o un chico tenía un brote de alta intensidad de una enfermedad mental y acudía al sistema público de salud, hacían el que podían y, además de las visitas del psiquiatra, activaban otros recursos como la visita de un psicólogo o recomendar el ingreso en un centro especializado.
Ahora el departamento ha puesto en marcha un programa específico para|por aquellos chicos que el sistema de salud ya tiene detectados como pacientes de una enfermedad mental porque han acudido alguna vez a un centro de salud mental infantil y juvenil (CSMIJ).
Cuando un niño o un chico sufra un brote, se avisará el CSMIJ y desde allí se activará, en las primeras 72 horas, un equipo que se desplazará hasta casa del chico -o hasta una residencia o centro en el que caso que no viva en casa- para proporcionarle atención médica. Además, y como gran novedad, a partir de allí se le realizarán dos o tres visitas por semana también a su casa por parte de profesionales del CSMIJ con el fin de hacer seguimiento del brote y estabilizarlo.
“Pensamos en un paciente, por ejemplo, con trastorno de la conducta alimentaria que se encuentra en una situación de empeoramiento y necesita una atención de mayor intensidad. Y pensamos que hay que hacerlo de esta manera”, ha explicado Dolz, que ha añadido que el programa también está hecho para brotes de pacientes con adicciones, depresiones o trastornos de conductos.
Nuevos profesionales
También es novedad que estas visitas de seguimiento que se harán después del brote no las harán sólo los profesionales médicos habituales de la salud mental sino que se añadirán educadores sociales y terapeutas educacionales. Estas visitas se harán siempre en pareja -educador social y terapeuta- y no tendrán una duración determinada, sino que dependerá de las circunstancias del momento.
“Nosotros entramos en su habitación o vamos con ellos al parque del lado de su casa y lo ayudamos desde allí”, ha explicado el educador social Santi Bertomeu sobre la tarea que harán a los profesionales como él en el nuevo programa. Hablamos con la escuela, con los centros donde el chico hace extraescolares y con la familia para entender lo mejor posible al chico. Y estamos con él para crear un vínculo y, a partir de aquí, establecer objetivos de mejora”.
Cuando se agoten los dos meses que dura el programa, se hará una evaluación para decidir si hay que prorrogarlo o si el paciente puede volver a una dinámica normal de seguimiento.
La conselleria se ha comprometido a incorporar 148 educadores sociales y terapeutas educacionales en el próxima año y medio para que la red de centros de salud mental infantil y juvenil pueda realizar este programa con los futuros brotes de salud mental. De momento, en junio ya ha incorporado 40 para todo el territorio catalán siguiendo criterios de necesidad de personal y de presión asistencial. Además, estos profesionales no se dedicarán sólo a este programa, sino que se incorporarán a la actividad ordinaria de estos centros que atienden a menores con trastornos mentales.
El conseller de Salud ha remarcado que en el 2018 sólo había cinco educadores sociales en la plantilla de los CSMIJ.
Un caso de éxito: 'Pokemon Go'
El programa ya ha entrado en funcionamiento y los CSMIJ de Cataluña ya lo aplican, aunque de momento la conselleria todavía no dispone de cifras de pacientes en este tratamiento porque se acaba de empezar a implementar. Pero antes de ponerlo en marcha, el departamento hizo un programa piloto con niños y chicos que son pacientes del Área de Salud Mental de Sant Joan de Déu.
Uno de los casos en que el piloto demostró la efectividad de la atención domiciliaria fue|estuvo en el caso de un chico que sufría una adicción en las pantallas y hacía un año y medio que no salía de casa. “Como su día a día eran las nuevas tecnologías le propusimos salir a la calle a jugar a Pokemon Go (un videojuego de realidad virtual en lo que se juega con el móvil yendo por la calle) y conseguimos que saliera de casa. Pensad que de tanto tiempo que llevaba|traía a casa no sabía ni qué día de la semana era ni en qué estación estábamos”, ha explicado el educador social Santi Bertomeu.
No hay preocupación por el repunte de covid-19
A la rueda de prensa con Argimon se le ha preguntado por el repunte de contagios de covid-19 que sigue mostrando la séptima ola|oleada y si preocupa al departamento que las cifras de ingresados y muertos sigan subiendo ligeramente. El conseller ha vuelto a reivindicar, como ha hecho en sus últimas intervenciones, que la covid ha venido para quedarse y que hay que aprender a convivir. Ha vuelto a insistir en qué no se plantean poner restricciones y ha añadido que mañana el consejo científico asesor publicará un decálogo de prácticas que hay que mantener para convivir con la presencia del virus.
Las estabilizaciones del gobierno español, un “anuncio más”
Sobre el anuncio de Pedro Sánchez del compromiso de hacer fijos a 67.000 sanitarios, Argimon ha dicho que no sabía nada. “Es un anuncio más como los que ya nos tienen acostumbrados”, ha comentado el conseller. De hecho, aunque el presidente del gobierno español aseguraba en una entrevista que los criterios para hacer estas contrataciones se habían pactado con las comunidades autónomas, el consejero|conseller ha afirmado que no sabía nada de la cuestión hasta el anuncio de ayer. “Esperaremos a ver qué dice el decreto y entonces haremos una valoración”, ha dicho Argimon.
“Lo que también esperamos son anuncios de lo que le hemos pedido, como actualice la regulación del grado y el posgrado en Medicina y la Ley del personal sanitario que, aunque ha sido una buena ley, necesita una revisión”, ha añadido Argimon.