HOSTELERÍA SUMINISTROS
El hielo, un bien escaso este verano
Los fabricantes y distribuidores leridanos aseguran que la situación es crítica y no pueden atender la demanda de sus clientes || La temperatura y las subidas de luz, principales causas de la carencia
Oriol Borràs sujeta una de las bolsas de hielos de su empresa, Borràs Congelados y Helados.
Estas últimas semanas la hostelería y los supermercados leridanos están sufriendo la falta de cubitos de hielo y deben restringirlos a sus clientes. ¿El motivo? que los fabricantes no están produciendo la cantidad acorde a la alta demanda típica del verano. Según Oriol Borràs, delegado del fabricante leridano Borràs Congelados y Helados, es debido al incremento del precio de la luz.
Las fábricas de hielo empiezan a almacenar este producto durante los meses de febrero, marzo y abril para que no se acumule la producción en el pico de demanda, durante el verano. “Las fábricas pararon la producción y es ahora, en verano, cuando se está notando. La situación es crítica y puede que en agosto no haya hielo”, asegura.
En su fábrica, Borràs produce unos 780 kilos de hielo en cubitos al día, pero esta cantidad “apenas llega para cubrir la demanda de nuestros clientes este año”. Para evitar el desabastecimiento total, desde Borràs han optado por racionar el hielo entre los empresarios habituales. “Si durante el año nos pedían 10 kilos cada semana, aunque ahora nos pidan 40 les avisamos de que solo pueden disponer de 10.
Es el único modo de que todo el mundo pueda tener acceso al hielo”. “Tenemos disponible otro tipo más puro, procedente de Noruega, pero el precio oscila entre 1 euro y 1,50 euros el cubito y muchos clientes no quieren comprarlo”, añade. Quien todavía no ha notado esta situación ha sido el sector del ocio nocturno.
Así lo ha confirmado a SEGRE Xavier Bosch, responsable del grupo Bonöbo, que señaló que “la empresa que nos suministra nos ha avisado que está pasando en los bares de la playa, pero por ahora no nos afecta directamente. Supongo que este mes lo notaremos”. Esto podría terminar afectando al cliente final ya que “tendremos que sumar esta subida a la de la luz y el alcohol”, señala Bosch.
Cubito ‘premium’ no apto para todos los bolsillos
La escasez de hielo afecta sobre todo al cubito normal que se sirve en bares, tiendas y gasolineras. Lo cierto es que existen otros tipos que todavía se han visto más afectados por esta escasez como el hielo picado, ya que para fabricarlo se necesita una maquinaria específica que aumenta el consumo eléctrico y, por lo tanto, el coste de producción. Otros hielos, en cambio, sí que están disponibles aunque son de una calidad más elevada como los premium para coctelería, cuyo precio es más alto que el de los normales.
