Nirvana le gana el juicio a Spencer Elden, el bebé de la portada de 'Nevermind'

Nirvana ha ganado el juicio definitivo contra Spencer Elden, de 31 años, que acusó a la banda por pornografía infantil. El graffitero, que cuando era un bebé apareció desnudo en la portada del álbum Nevermind, en 1991, pedía una indemnización de 150.000 dólares por daños y perjuicios pero un juez estadounidense ha desestimado el último intento del hombre contra Nirvana por la icónica portada.

Spencer Elden, durante el proceso que ha durado años contra Nirvana, aseguró que su imagen en la portada del disco "Nevermind" constituía abuso sexual infantil y que lo presentaba como una estrella del porno. El juez Fernando Olguin de California, explicó en su sentencia que Elden había dejado pasar demasiado tiempo para afirmar que había sido explotado sexualmente, según publican los medios especializados. Las vías legales de Elden ahora están casi agotadas ya que no puede volver a presentar el caso ante la Justicia, aunque sus abogados aseguraron a los medios estadounidenses que apelarían el fallo. 

La demanda de Spencer Elden alega que no dio el consentimiento para que se usara la fotografía de él cuando era bebé en la que aparecía nadando desnudo en una piscina hacia un billete de un dólar perforado con un anzuelo. El fotógrafo que hizo la imagen, Kirk Weddle, también estaba entre los acusados, al igual que los exmiembros de Nirvana Dave Grohl y Krist Novoselic; también Courtney Love, la viuda del fallecido cantante Kurt Cobain. Spencer Elden denunció a todos en 2021 argumentando que todavía tenía derecho a compensación, porque esta imagen seguía provocándole angustia y daños económicos en su vida adulta. Elden, que pedía una compensación de 150.000 dólares, alegó que ha sufrido y seguirá sufriendo "daños de por vida" como resultado de la obra, incluida "angustia emocional extrema y permanente", así como "interferencia con su desarrollo normal y progreso educativo", por lo que ha requerido "tratamiento médico y psicológico".

La demanda fue desestimada y luego se volvió a presentar en enero. El juez de Los Ángeles dictaminó que Elden presentó su caso mucho más allá del plazo de prescripción de 10 años. Los padres de Elden recibieron 200 dólares por la foto en 1991 que aparecía en la portada de Nirvana, que entonces era una banda casi desconocida.