Las vitaminas que ayudan a sobrellevar la menopausia

La menopausia es una etapa de transición en la que cobra especial importancia seguir hábitos de vida saludables y llevar a cabo una dieta equilibrada. Asimismo, se debe aportar al organismo los micronutrientes que necesita en este periodo para paliar síntomas y efectos de la menopausia para seguir gozando de buena salud. Las vitaminas juegan un papel fundamental.

Las propiedades antioxidantes de la vitamina C la convierte en aliada a la hora de combatir síntomas asociados con la menopausia, ya que ayuda a frenar la acción de los radicales libres y el envejecimiento que desencadena a nivel celular. En esta etapa, la vitamina C contribuye a mantener en buen estado el sistema inmune, también contrarresta los efectos negativos que provoca el descenso en los niveles de estrógenos que implica la menopausia. La piel más elástica y con menos arrugas y los síntomas, como la fatiga o los característicos sofocos de la menopausia, pueden quedar bajo control, incluyendo en la dieta las dosis necesarias de vitamina C. Es importante tomar frutas y, en especial, cítricos y frutos rojos.

En general, las vitaminas del grupo B desempeñan múltiples funciones en procesos metabólicos, fisiológicos y mentales. La B3 (niacina) es importante en la menopausia y postmenopausia porque interviene en la transformación de los alimentos, que los convierten en energía, minimizando los posibles episodios de cansancio y fatiga inexplicables. La niacina, además, favorece la salud del sistema nervioso y, en este periodo, ayuda a mitigar las situaciones de estrés y ansiedad que pueden experimentarse. Carnes, pescados, lácteos o huevos son algunas fuentes de las que obtener vitamina B3.

Por su parte, la vitamina B12 (cobalamina) interviene en el proceso metabólico y en la producción de energía, aumentando la vitalidad que puede verse disminuida durante la menopausia. Además,  también ayuda a evitar la acumulación de grasas y el aumento de peso, algo que experimentan muchas mujeres en esta etapa. Por otra parte, la cobalamina interviene en la formación de glóbulos rojos, resultando esencial para evitar que la anemia surja durante la menopausia. Se encuentra en alimentos de origen animal, algo que deben tener en cuenta mujeres que sigan dietas veganas o vegetarianas.

El ácido fólico resulta especialmente importante para el correcto desarrollo de las funciones cerebrales y del sistema nervioso. Mantener activos los mecanismos neurológicos y frenar el deterioro cognitivo, que puede iniciarse en esta etapa, es misión de la vitamina B9 que puede obtenerse gracias a los cereales, a las legumbres y a las verduras de hoja verde, entre otros alimentos.

En dosis correctas, entre las mejores vitaminas para la menopausia, la vitamina B6 puede hacer mucho por mejorar el estado de ánimo, ya que interviene en la producción de hormonas directamente relacionadas con el bienestar como la serotonina y la melatonina. Por tanto, reducir o aliviar síntomas frecuentes, como la irritabilidad, los bruscos cambios de humor o la depresión, es posible con la presencia adecuada de esta vitamina en el organismo. La carne de aves, las legumbres, la soja o los huevos son algunos de los alimentos ricos en vitamina B6.

La alteración en la producción hormonal y, sobre todo, la disminución progresiva de estrógenos, es característica de la menopausia. Además, la principal causa de uno de sus síntomas más molestos: los sofocos. La vitamina B5 puede ser de gran ayuda para minimizar los sofocos, reduciendo, al mismo tiempo, el estrés o las alteraciones del sueño que estos sofocos pueden llegar a provocar. Pescados y moluscos, aguacates, champiñones y vísceras son algunos de los alimentos que contienen esta vitamina.

Considerada la vitamina "de la belleza" por su alto poder antioxidante, la vitamnia E es, además, especialmente importante para el cuidado de la salud cardiovascular de la mujer en esta etapa de la vida. Favorece el buen estado de la piel, del cabello y de las uñas, frenando el normal envejecimiento celular. Tomar alimentos que la contengan, como la soja, el aceite de oliva, los cereales y frutos secos, como las almendras, es una excelente medida para superar los síntomas de la menopausia.

Entre las vitaminas para la menopausia naturales, la D desempeña un papel determinante porque es esencial para la correcta absorción del calcio. Debemos recordar que en esta etapa no es extraño que se inicie una progresiva descalcificación que, puede derivar en la pérdida de masa ósea y en enfermedades como la osteoporosis. Los alimentos ricos en calcio, unidos a la presencia de vitamina D en el organismo, contribuyen a frenar este proceso. Por ello, la importancia de obtener esta vitamina en la menopausia con el fin de mantener los huesos fuertes. La vitamina D se sintetiza gracias a la luz solar.