TURISMO PROGRAMA
Arranca la venta de viajes del Imserso con 816.029 plazas
Vuelven a la normalidad después de dos años marcados por la pandemia
El programa de turismo social del Imserso puso ayer a la venta los primeros viajes para la temporada 2022-2023 en siete comunidades autónomas, en una campaña que vuelve a la normalidad tras dos años de alteraciones por culpa de la pandemia. Así, los residentes acreditados preferentes, aquellos que cuentan con mayor puntuación en el baremo del programa, de Catalunya, Andalucía, Cantabria, la Comunidad Valenciana, Extremadura, Madrid, Murcia y Melilla pudieron acceder a las ofertas y formalizar sus reservas. Para los no acreditados, hoy se abre el plazo.
El resto de comunidades autónomas podrán reservar sus vacaciones a partir de mañana. Como en el caso anterior, tendrán prioridad los acreditados preferentes. El programa de este año ofrece un total de 816.029 plazas para viajar entre octubre de 2022 y mayo de 2023, aunque desde el ministerio de Asuntos Sociales y Agenda 2030 señalaron que si la demanda superase la oferta inicial, existe margen para ampliar la oferta.
El programa social ofrece tres modalidades de viaje: costa peninsular, costa insular y turismo de interior. Los precios oscilan este año entre los 115 euros en el caso de viajes de cuatro días a capitales de provincia a los 405 euros en estancias de 10 días a las islas canarias. Estas tarifas incluyen habitación doble a compartir, pensión completa (media en caso de viajes a capitales de provincia) y transporte.
Según señala el programa, los precios podrán disminuir para las personas que tengan recursos económicos iguales o inferiores al importe de las pensiones no contributivas de jubilación e invalidez de la Seguridad Social. La reservas de los paquetes turísticos pueden realizarse de forma presencial en las agencias de viaje o por vía telemática en las páginas web acreditadas hasta el fin de temporada, siempre que queden plazas. Según datos del Instituto de Mayores y Servicios Sociales, las solicitudes de este año han alcanzado los 2,6 millones de acreditados.
Por el contrario, la mayor problemática ha sido la renuncia a participar de numerosos hoteles, especialmente en las zonas de costa, que alegan que por culpa de la inflación no cubren los costes.