Las abogadas se sienten discriminadas por sus compañeros hombres, según un estudio

ACN Barcelona - Un estudio del Consejo General de la Abogacía Española (CGAE) asegura que las mujeres del sector todavía están discriminadas respecto de sus compañeros hombres. Aunque las abogadas son mayoría a la profesión, todavía les cuesta llegar a los puestos de dirección de los colegios o los grandes despachos, y sufren discriminación durante el embarazo y la maternidad. Por eso, piden que se mantengan las cuotas, que se flexibilicen las medidas de conciliación familiar y que no se las relegue a papeles secundarios. El informe se ha hecho con 15 'focos groups' en 15 colegios de la abogacía de todo el Estado, y se ha presentado este jueves por la tarde en el cuarto 'Women Business and Justice European Forum' que se ha celebrado en el Colegio de la Abogacía de Barcelona.

En las nuevas generaciones las mujeres ya superan a los hombres en la abogacía y en total son el 53% de los profesionales del sector, pero sólo el 22% de los colegios de todo el estado están dirigidos por mujeres.

Según el documento, el llamado techo de cristal está muy presente sobre todo en los grandes despachos de abogados. Muchas abogadas salen de estos despachos y se van a hacer de abogadas de empresas donde se sienten más reconocidas, valoradas y con más posibilidades de conciliación laboral. Muchas abogadas también lamentan que se las considere más adecuadas por el derecho de familia que por otros ámbitos más lucrativos como el mercantil. También sufren sesgo de género por parte de los clientes, que prefieren hablar con abogados hombres porque se los considera más agresivos.

El informe recomienda que los colegios de la abogacía hagan campañas de sensibilización visibilizando y poniendo en valor el trabajo de las mujeres abogadas. También se pide garantizar la paridad de ponentes en los congresos y jornadas organizados por los colegios, sobre todo en el ámbito penal, concursal y mercantil, donde hay más diferencia de presencia de hombres y mujeres.

El embarazo y la maternidad siguen perjudicando a las mujeres en el ámbito laboral, y la abogacía no es una excepción. Además, en algunos despachos se les acaban adjudicando los casos menos rentables económicamente o se las promociona menos para ascender en el escalafón. Tampoco hay muchas medidas de flexibilidad horaria para conciliar el trabajo con las tareas familiares.

En los casos de acoso o discriminación, las abogadas piden más prevención y protección. Por último, las abogadas ven necesario establecer cuotas, porque "la diversidad no surge de manera natural". Así, piden que al menos el 40% de las directivas de los colegios profesionales sean mujeres. Además, denuncian que muchos planes de igualdad no se cumplen en la práctica.