El Gordo más repartido

El premio Gordo de la Lotería de Navidad dejó ayer una lluvia de millones muy repartida por toda España, aunque se quedó principalmente en A Coruña, Fonsagrada (Lugo), Moreda de Aller (Asturias), Roquetas de Mar (Almería) y Madrid. El 05.490, uno de los números más bajos de la historia que han sido agraciados con el primer premio, dotado con cuatro millones de euros a la serie (400.000 euros al décimo), salió las 11.21 horas, después de más de dos horas de sorteo. Fue contado en el segundo alambre de la quinta tabla por los pequeños Alonso Dávalos y Ángel Abaga, quienes lo celebraron con un “te quiero” y muchos, muchos nervios.

Cinco administraciones de A Coruña, Lugo, Asturias, Almería y Madrid se quedaron con el 86% del Gordo, que regó de millones a 71 municipios de una treintena de provincias, lo que lo convirtió en uno de los premio del Sorteo Extraordinario de Navidad más repartidos en sus más de 200 años de historia. Una parrillada de Cambre (A Coruña) repartió entre sus clientes y sus ocho empleados unas 30 series −120 millones de euros− del 05.490. En el bar se enteraron de que habían sido agraciados cuando estaban viendo la retransmisión, aunque al principio pensaban que sólo era la terminación.

La sorpresa fue cuando se enteraron que era el Gordo. Optaron por cerrar el bar. En Asturias se consignaron 410 décimos en la administración número 3 de Aller y, de ellos, el club Atletismo Mieres ha distribuido 344 décimos (137,6 millones) en participaciones.

Los jóvenes vendieron papeletas de cuatro euros más un euro de donativo por todos los concejos de la cuenca del Caudal, lo que proporcionó a la entidad deportiva un beneficio de 1.720 euros. En menor cuantía, los millones llegaron a lugares como la pedanía Columbrianos (Ponferrada), de unos 1.300 habitantes. Fueron doce millones, tres series, que se vendieron por terminal en el bar Moderno.

También la administración de un centro comercial en Madrid repartió 40 millones y por una razón: la fecha de cumpleaños de Luis López, el hijo de la dueña de la administración. Luis nació el cinco de abril de 1990, “casi como la canción de los Celtas Cortos y lo juego todos los años”, bromeaba ayer la lotera. La diosa fortuna quiso hacerse notar, incluso, en el propio Teatro Real, donde Perla, en paro y madre de dos hijos adolescentes, escuchó la cifra mágica desde uno de sus asientos, y la emoción hizo que tuviera que ser atendida por personal del Samur.

Asimismo, una familia abonada desde hace cuarenta años al número 05.490 fue la agraciada con los 4,4 millones de euros que tocaron en Bilbao, vendidos por la popular lotería Ormaetxea. Entre risas y mucha alegría, la propietaria del establecimiento, Ana Ormaetxea, y el administrador, Sergio Etxebarria, relataron que la familia juega un décimo de este número durante todo el año y en Navidad compran algo más de una serie. “Juegan todas las semanas y llevan varias generaciones comprando el mismo número: es un premio a la constancia”, comentó Etxebarria, quien aseguró que conocen y “ponen cara” a los premiados.

El primer premio de la Lotería de Navidad se acordó también de Catalunya aunque, un año más, pasó de largo en las comarcas leridanas. En total, repartió 23,6 millones de euros entre Barberà del Vallès, donde se vendieron cinco series; Barcelona, con tres décimos; Platja d’Aro, con otros tres décimos; y L’Hospitalet de Llobregat, Rubí y Sant Vicenç de Castellet, con un boleto cada una. La exalcaldesa de Barberà del Vallès Sílvia Fuster fue una de las agraciadas con un décimo del primer premio con un número compartido con cuatro amigas y aseguró que “estoy muy contenta por el municipio”.

Asimismo, el propietario del estanco de Passeig de la Zona Franca 244 de Barcelona, donde también cayó parte del Gordo, Xavier Cañas, mostró su felicidad por que el premio haya tocado “en un barrio obrero y trabajador, donde hay gente que lo está pasando mal”. Por su parte, la lotera de la administración número 13 de L’Hospitalet, Sílvia Menéndez, que solo vendió un décimo agraciado con este premio, explicó que recibió la llamada de la persona había comprado el número: “Le he dicho que no hacía falta que viniera, que nos mandara unos bombones y que disfrute”. El Gordo cayó en Benasque y en las provincias de León, Alicante, Castellón, Sevilla, Valladolid, Tenerife, Murcia, Granada, Valencia, Ávila, Baleares, Cáceres, Ciudad Real o Huelva, entre muchas otras.

Tan solo las comunidades de Cantabria y La Rioja y las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla no fueron agraciadas con este premio.