El pesebre viviente más tierno

Desde hace nueve años los pequeños de la Escola Bressol Tris Tras de La Portella protagonizan un pesebre viviente, una iniciativa que ya se ha convertido en tradición en esta escuela y para las familias, que esperan impacientes saber qué papel habrá desempeñado su hijo. De esta manera, el miércoles los pequeños Nina, Leo, Amèlia, Maria, Damián, Mia, Maria, Lucas, Moulaye e Issis, de entre 0 y 2 años, protagonizaron el pesebre viviente de la guardería de este municipio de poco más de 700 habitantes. Después de tres semanas de ensayos y bajo la dirección de las docentes Raquel Pueyo y Anna Oriach, los diez niños inscritos actualmente en la guardería, todos disfrazados, desempeñaron su papel a la perfección.

Asimismo, bailaron y cantaron villancicos tan reconocidos como Arbre de Nadal, Cagatió, Fum fum fum, We wish you a marry christmas y Jingle bells ante un selecto público, formado por padres y familiares. Un encuentro que emocionó a ambas partes, puesto que algunos niños que, al ver a sus progenitores, “se pusieron muy contentos y empezaron a bailar o a tocar la pandereta”, explicó la directora del centro Norma Cirera, que añadió que también “les hace mucha ilusión a las familias porque la Navidad es muy especial, sobre todo cuando tienen niños, y, además, no saben qué papel va a interpretar su hijo hasta que lo ven aquí, entonces es una sorpresa”. Asimismo, añadió que, al hacer casi una década que se celebra esta función, hay padres que han visto a más de un hijo participar.

“Este año tenemos a una niña que interpreta a la estrella y da la casualidad que hace unos años su hermana mayor interpretó el mismo papel”, explicó Cirera. Con todo ello, la directora afirma que los pequeños han sido participes de todo el proceso, desde la elección de los personajes hasta la interpretación. Asimismo, explica que con esta actividad desarrollan la expresión corporal de los pequeños y habilidades como interactuar ante un público.