ESNOTICIA
El segundo premio recae en el 04.074 y reparte millones entre Bizkaia y Girona
Trabajadores de Tragsa de Madrid adquieren la mayor parte del 45.250, agraciado con el tercero
El segundo premio de la Lotería de Navidad cayó ayer en otro número bajo, el 04.074, dotado con 125.000 euros al décimo, regando de millones Bizkaia y Girona. Concretamente, repartió 53 millones de euros en la localidad vasca de Mungia, la gran mayoría en el bar Uri, y otros 18,5 millones en Bilbao, mientras que el resto de lo consignado en los dos despachos de este número, hasta 112 millones, se devolvieron al quedarse sin vender. En este sentido, la lotera de la calle Ledesma de Bilbao admitió que fue “complicado de vender” y que habían devuelto boletos, porque era un número “feo”.
De hecho, tuvo colgado en ventanilla el 04.074 hasta última hora de la tarde del miércoles. Quien sí vendió los 450 décimos que tenía consignados de este número fue la administración número 1 de Puigcerdà, que los distribuyó todos en ventanilla. Parte de estos boletos (120) se vendieron a través de la guardería El Drac Blanc, en el municipio vecino de Ger −más información en la página 3−.
En Olot, en la administración 1 del número 16 de la calle de Sant Rafael, también se despacharon 45 series del 04.074, lo que se traduce en 56.250.000 euros. Es la segunda vez que su propietario, Alfredo Alfaro, celebra haber vendido un número cantando por los niños de San Ildefonso, después de que en 2018 repartiera el Gordo. Cuarenta minutos después del primer premio llegó el tercero, para el 45.250, agraciado con 500.000 euros a la serie.
Pasado el mediodía hacía aparición y la alegría se trasladaba a la madrileña calle Alcalá, donde una administración vendió 1.800 décimos, 1.400 a trabajadores del grupo Tragsa. El aparcamiento de esta empresa especializada en actividades de ingeniería, consultoría y asistencia técnica, donde ya todo estaba organizado para la copa de Navidad, se transformó ayer en una auténtica fiesta de celebración compartida, con música a todo volumen, cava, comida y, sobre todo, alegría, y risas. “Es un premio compartido”, relataban los agraciados.
La firma había comprado dos números para este sorteo para vender entre toda la plantilla de empleados, por lo que jugaban diez euros del número 45.250 en cada décimo. “25.000 euros por persona como mínimo, que vienen muy bien”, explicó Santi Recojo, uno de los afortunados. “Las buenas noticias corren como la pólvora”, añadió este afortunado, que explicaba que rápidamente terminó lo que tenía entre manos y acudió a la sede, donde ya estaba organizada la fiesta de empresa.