El plan de los EE.UU. en Ucrania: dar armas a Zelenski para que negocie con Putin
Un año después de la invasión rusa de Ucrania, los Estados Unidos se aferra a una estrategia: dar millones de dólares en ayuda militar al presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, para que consiga avances en el campo de batalla y forzar una eventual negociación con su homólogo ruso, Vladímir Putin. Los planes del Gobierno de Joe Biden, están impregnados de una nueva urgencia por el hecho de que la oposición republicana controla la Cámara Baja después de su victoria en las elecciones de noviembre y algunos de sus miembros más conservadores quieren recortar la asistencia a Ucrania.
Estados Unidos es el país que más ayuda militar ha entregado en Ucrania desde el inicio de la guerra. Hasta ahora, ha aprobado 30.000 millones de dólares. También hay cierto temor al hecho que la unidad de Europa se resquebraje a medida que la contienda se alarga, aunque hoy por hoy la coalición occidental "se mantiene fuerte", aseguró una funcionaria estadounidense de alto rango a un reducido grupo de periodistas, entre ellos EFE. Con eso en mente, los Estados Unidos tiene la esperanza de que Ucrania pueda hacer importantes avances en el campo de batalla esta primavera y estar en una mejor posición para abrir algún tipo de negociaciones con Rusia.
La idea de Washington, según la citada funcionaria, es seguir dando armas a Zelenski e imponiendo sanciones para eventualmente arrastrar a Putin en la mesa|tabla de negociación. Por una parte, según la OTAN, Rusia ya ha iniciado una gran ofensiva en Ucrania con la movilización de miles de soldados y el objetivo de conquistar todo el Donbás, en el este, y arrancar a los ucranianos Bájmut, una de las ciudades de esta región y que está en ruinas por los constantes bombardeos. Además, Rusia ha aumentado su presencia en el mar Negra, lo cual podría apuntar a una nueva ofensiva en el sur; y en Ucrania lo preocupa que miles de soldados rusos puedan cruzar en su territorio a través de Bielorrusia con la finalidad de tomar Kiev, como ya hicieron sin éxito hace un año. Las fuerzas ucranianas se está preparando para repeler los ataques rusos y la OTAN está haciendo todo el posible para que lleguen a Ucrania los tanques prometidos y se refuercen las defensa aéreas con sistemas como los Patriot, si bien todavía no se ha aprobado el envío de aviones de combate.
Washington sí que se está preparando para la posibilidad de un estancamiento del conflicto, en el cual las dos partes sigan perdiendo y ganando territorio hasta llegar a un punto muerto, momento en el cual podría darse algún tipo de tregua. Este escenario se parecería a la situación actual entre Corea del Norte y Corea del Sur con una convivencia basada en un armisticio, pero sin un tratado de paz, dijo a EFE William Taylor, exembajador de los EE.UU. en Ucrania y vicepresidente del programa de Rusia y Europa en el Instituto de Pau dels Estats Units. Los escenarios podrían ser diversos desde que Ucrania controle el 80% de su territorio y Rusia ocupe el 20% restante o "una guerra corta" con las fuerzas ucranianas superando una vez más cualquier expectativa y reconquistando zonas ocupadas, mientras el Ejército ruso colapsa.
Hoy por hoy, mientras todos estos escenarios se analizan entre los círculos políticos de Washington, el Gobierno de Biden se concentra en las sanciones en Rusia y la ayuda a Ucrania. De hecho, días antes o después del aniversario de la invasión, el 24 de febrero, los Estados Unidos tiene previsto anunciar más asistencia militar a Ucrania y sanciones contra Rusia, una nueva vez|golpe en el Kremlin que se sumará a las sanciones que impondrá también en estas fechas la Unión Europea.