Cuatro hosteleras en los inicios del turismo en Lleida

La dirección general de Turismo de la Generalitat trabaja para visibilizar, reivindicar y poner en valor el papel de la mujer en la hostelería. Por ello, ayer presentó el libro Dones i Turisme. Pioneres del sector, que recoge entrevistas a 16 mujeres y 4 de ellas son de Lleida.

En la obra explican sus inicios en el turismo y las dificultades con las que se han encontrado. En este sentido, Carme Oliver, del restaurante Can Rubies de la capital del Segrià, destaca que “un día le dije a mi marido que el negocio era de los dos y que o nos repartíamos el trabajo o cerrábamos el chiringuito”. También asegura que “este negocio es bonito, pero imprevisible” y afirma que “aún tenemos clientes de hace 40 años que vienen con sus hijos y sus nietos y esto es muy gratificante”.

Por su parte, Eulàlia Ordeig, del balneario Sant Vicenç de El Pont de Bar, se muestra satisfecha “de haber tirado adelante y consolidado, con mi marido, un negocio de unos 300 años que aún continúa modernizándose y adaptándose a los nuevos tiempos”. Mientras, Lolita Quintana, del hostal Talabart de Les, recuerda que “cuando abrió Baqueira en el valle solo había dos establecimientos hoteleros: La Creu de Salardú y nuestra casa” y “nosotros teníamos ascensor y, por este motivo, los primeros clientes VIP que llegaban para esquiar nos los enviaban”. Asimismo, Lourdes Pardell, de Cal Petit del Cantoné de Llardecans, hace balance y asegura que “mi vida dio un giro, estaba ocupada atendiendo a los clientes, poniendo la casa a punto para cuando viniesen”.

También considera que su establecimiento fue “bueno para el pueblo” porque “los huéspedes iban a la piscina, compraban en las tiendas...”. La directora general de Turismo, Marta Domènech, aseguró que “el papel de la mujer en este sector es y ha sido muy importante, porque es quien ha mantenido los establecimientos, la que ha subido y bajado la persiana cada día”. Además, reconoció que “ocupamos el 49,8% de los puestos de trabajo, pero aún estamos muy lejos de la paridad en cargos directivos y de responsabilidad”.

Por otra parte, ayer tuvo lugar una jornada con mujeres del sector. Entre las participantes se encontraba Mireia Font, propietaria de Casa Leonardo de Senterada, quien defendió un modelo turístico sostenible y habló del proyecto Gratitud Pallars.