El juego une generaciones en La Seu

El Festival del Joc del Pirineu convierte este fin de semana La Seu d’Urgell en una ludoteca gigante con espacios destinados a todos los públicos y que consigue unir generaciones entorno a las diferentes modalidades de juegos. La séptima edición del certamen, único de estas características en el Pirineo, se expande año tras año. Se trata de una experiencia diferente a lo habitual en eventos de este tipo.

Es la ciudad entera la que está viviendo los juegos como elemento cultural y como forma de ocio saludable y socializadora, tal y como explican sus organizadores. Centenares de personas de la ciudad, la comarca, pero también llegadas de otras ciudades catalanas, participaron ayer y lo continuarán haciendo hoy. Todas ellas jugaron en espacios tan diversos como la sala de Sant Domènec, el Espai Ermengol, la Sala la Immaculada o el Cetap, en el edificio de les Monges.

Otros, incluso desde hoteles y restaurantes de la ciudad. Después que abriera durante la semana con sesiones dirigidas a 800 alumnos de las escuelas de Primaria y Secundaria de la ciudad, el fin de semana es apto para todo el público. Ayer fue el turno de actividades dirigidas y partidas exclusivas.

Destacó la presentación del juego Ierusalem Anno Domini, de temática religiosa, creado por Carmen García, de la editorial Devir.La sala de Sant Domènec es el epicentro del festival, donde los asistentes, guiados por un gran equipo de voluntarios, tienen a su disposición más de 300 juegos de mesa. La iniciativa, que pretende revalorizar los juegos de mesa como alternativa al tiempo libre y de relación social, tiene como atractivo la posibilidad para los asistentes de divertirse con juegos nuevos y algunos prototipos que todavía no han visto la luz.