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Miles de personas asistieron ayer la procesión del Sant Enterrament de Lleida
Once pasos acompañaron a las cofradías y la Mare de Déu de la Soledat lució su manto restaurado
Centeneres de asistentes durante el paso de la procesión en la avenida Catalunya.
Al ritmo de los bombos y los tambores y con la expectación y el silencio de centenares de asistentes, la ciudad de Lleida acogió ayer por la noche la procesión del Sant Enterrament del Viernes Santo y que organiza la Congregació de la Puríssima Sang. Los Armats de la Sang volvieron a encabezarla con los golpes de sus lanzas sobre el asfalto y el reparto de golosinas entre el público, especialmente el infantil. Entre las autoridades, destacó la presencia del alcalde, Miquel Pueyo, y el obispo, Salvador Giménez, que no asistieron el año pasado.
Pueyo dejó la representación municipal en manos de los tenientes de alcalde Jordina Frexinet y Toni Postius mientras que el obispo viajó a La Granadella para asistir por primera vez a la tradicional Processó del Desclavament. Como novedad este año, cabe destacar que la Mare de Déu de la Soledat lució su manto restaurado. Se trata de una pieza única y casi centenaria, datada en 1929, confeccionada con terciopelo, hilo de oro e incrustaciones de pedrería y perlas naturales.
La rehabilitación ha costado unos 12.000 euros.Los once pasos de las cofradías leridanas con sus vestas y penitentes –algunos de ellos descalzos, con cadenas atadas a los pies y portando una cruz– recorrieron la avenida Catalunya, las calles Lluís Companys, Unió, Templers, Acadèmia, Alcalde Costa y la avenida Catalunya hasta la iglesia de la Puríssima Sang. Por la mañana, los fieles participaron en los viacrucis. Uno de ellos es el que organiza el Arxiprestat de la Seu Vella, con los Portants de Sant Llorenç subiendo hasta la nave central del monumento.Por otra parte, la ausencia del papa Francisco, para evitar el frío tras recuperarse de una bronquitis, marcó el viacrucis en el Coliseo de Roma, dedicado a los conflictos en el mundo.
El Barri Antic, escenario de la procesión del Jueves Santo
El Barri Antic fue el escenario la medianoche del jueves de la Porcessó del Silenci con el Sant Crist de l’Agonia y la Mare de Déu de la Pietat, una de las citas destacadas de la Semana Santa en la capital del Segrià. Empezó en la iglesia de Sant Martí. También hubo la ‘Rompida de la Hora’ y la ‘Rompida del Silencio’.
La Virgen de la Soledad lució su capa restaurada.
El Cristo yacente custodiado por los Armados.
El Barrio Antiguo fue el escenario la medianoche del jueves de la procesión del Silencio con el Sant Crist de l'Agonia y la Virgen de la Piedad
