Muere Joan Bayén, el mítico propietario del bar Pinotxo del mercado de la Boqueria
El establecimiento se ha visto inmerso en un polémico traspaso después de la venta de la licencia por|para las desavenencias familiares
Joan Bayén, el mítico camarero y propietario del bar Pinotxo de la Boqueria, ha muerto este martes a los 88 años, según han confirmado fuentes del emblemático mercado barcelonés. Juanito, como lo conocía todo el mundo, se jubiló el otoño del año pasado después de dedicar toda su vida a servir a la clientela vestido con su peculiar chaleco y pajarita. Tanto la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, como|cómo el cabeza de lista del PSC a las elecciones municipales, Jaume Collboni, y el de ERC, Ernest Maragall, han lamentado la pérdida de quién han recordado como "el alma de la Boqueria". La muerte de Bayén llega un mes y medio después de la venta de la licencia del establecimiento y el polémico traspaso del mismo a causa de desavenencias familiares.
La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ha trasladado su pésame a la familia y amistades de Joan Bayén “el mítico Pinotxo de la Boqueria” y ha asegurado que Barcelona no lo olvidará. “Recordaremos siempre su sonrisa, su carisma, su extremada amabilidad y la pasión por lo que hacía,” ha añadido en un mensaje que ha difundido a través de su canal de Telegram.
Por su parte, el cabeza de lista del PSC a las elecciones municipales de Barcelona, Jaume Collboni, ha expresado mediante un mensaje en Twitter, que Barcelona ha perdido a un “auténtico referente” y un “emblema de muchas generaciones”. Ha reconocido su “capacidad de trabajo” y su “carácter afable y extrovertido”. En este mismo sentido se ha expresado el portavoz de ERC y cabeza de lista de los republicanos a las municipales, Ernest Maragall. que ha afirmado que Bayen era “el alma, el referente, el símbolo y uno de los históricos del mercado y de Ciutat Vella”.
Traspaso polémico
La muerte de Bayén llega un mes y medio después de la venta de la licencia y el polémico traspaso de este establecimiento a raíz de una disputa familiar. Según un comunicado del despacho de abogados Enrique Moreno, Pinotxo se puso en contacto con ellos y les explicó que sufría una situación de “maltrato” por parte de los familiares que trabajaban con él en el bar. Entre estos destacaba a su sobrino, Jordi Asín, con quien habría mantenido las mayores desavenencias.
Fuentes de Enrique Moreno han apuntado que Bayén “no tenía ninguna documentación de la sociedad que regentaba el negocio y no sabía nada de la gestión del bar”. Al mismo tiempo, han indicado que “sentía angustia” y no se atrevía a preguntar a sus sobrinos “por la situación económica” del establecimiento. En esta línea han destacado que el año 2011 el sobrino de Bayén registró la marca “Bar Pinotxo” a su nombre y lo hizo a escondidas de su tío. Han asegurado que mientras los letrados de ambas partes trataban de negociar un acuerdo de liquidación pacífica de la sociedad gestora y la recuperación de la marca por parte de Bayén, su sobrino habría acudido a los medios de comunicación para presentarse como destinatario principal de la herencia de Bayén.
Finalmente, el 27 de octubre, el mítico Pinotxo se vio obligado a abandonar el bar donde había trabajado toda la vida después de que sus sobrinos “organizaran una especie de revuelta para hacerle marchar”. El despacho ha afirmado que Jordi Asín no tiene legitimidad legal sobre la sociedad gestora del negocio y ha recordado que esta se disolvió el pasado mes de enero. El despacho de abogados ya han presentado una acción legal para que Bayén recupere la marca Pinotxo. Al mismo tiempo ha indicado que no dudarán en emprender las acciones legales necesarias para preservar el legado y garantizar de que el Bar Pinotxo continúe con un “digno sucesor”.