Creu de Sant Jordi para Antoni Gelonch y los Raiers de la Ribera del Segre

El abogado y escritor leridano Antoni Gelonch ha sido distinguido con la Creu de Sant Jordi 2023. La Creu de Sant Jordi es uno de los máximos reconocimientos que otorga la Generalitat. Se creó en 1981 con la finalidad de distinguir a las personas naturales o jurídicas que, por|para sus méritos, hayan prestado servicios destacados en Cataluña en la defensa de la identidad o en el plano cívico y cultural.

También han recibido la distinción el cineasta Agustí Villaronga –a título póstumo-, el festival Sónar, el grupo Sopa de Cabra, la activista social Vicki Bernadet, el pintor y escultor Antoni Miró, la actriz Julieta Serrano, el activista y expresidente de Òmnium Cultural Jordi Cuixart, el músico Jaume Sisa y el pintor Joan-Pere Viladecans, entre otros.

Antoni Gelonch ha sido distinguido con este reconocimiento por sus relevantes esfuerzos en favor de la conservación y la divulgación del arte. Mecenas cultural y miembro de honor de la Reial Acadèmia Catalana de Belles Arts de Sant Jordi, ha construido con trabajo y estima la Colección Gelonch Viladegut, una colección privada de grabados y libros de arte con piezas de gran calidad y significación, considerada como una de las más importantes de Europa. Su voluntad de compartir aquello que para|por él significa la belleza con su ciudad de nacimiento lo llevó a facilitar que la totalidad de su colección se encuentre hoy en día depositada en el Museu de Lleida, a fin de que el público la pueda disfrutar.

El Govern también ha acordado otorgar la Cruz de Sant Jordi de la Generalitat de Catalunya, en forma de placa, a varias entidades, entre las cuales se encuentra la Asociació Cultural dels Raiers de la Ribera del Segre. La asociación es distinguida por notorio papel en la conservación del patrimonio inmaterial catalán, a través del recuerdo y de la manifestación del oficio de raier. Hasta principios del siglo XX, Coll de Nargó fue uno de los núcleos más importantes por|para el transporte fluvial de madera en Cataluña. Hacia los años ochenta, varias décadas después de su desaparición, se recuperó esta actividad por parte de los vecinos de la población y lo convirtieron en una fiesta. Cada año los rais de Nargó vuelven a bajar por el Segre para reivindicar su pasado fuertemente ligado al oficio. En el 2022 los raiers fueron declarados, por medio de una propuesta conjunta internacional, Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO.