Cuenta atrás para el Gargar más social

Cuenta atrás para la octava edición del Gargar Festival de Penelles, que desde mañana hasta el domingo se convertirá en el epicentro del street art. Dentro de la programación, ayer se inauguró en la antigua iglesia de este municipio de la Noguera la exposición ‘Art Singular’ impulsada por la fundación Josep Santacreu, que da visibilidad a la creación artística de personas con enfermedad mental, diversidad funcional o en riesgo de exclusión social. Esta vertiente social también estará presente en el certamen a través de dos nuevos murales, uno de ellos creado por la asociación Binòmica −que trabaja con la escuela Estel de Balaguer− y, otro, pintado por jóvenes internos del Centre Educatiu de Justícia Juvenil El Segre de Lleida.

Y es que el Gargar Festival de Murals i d’Art Rural quiere aprovechar su alcance internacional para dar visibilidad a colectivos vulnerables. “Tenemos un altavoz y la oportunidad de dar voz a estos colectivos a los que muchas veces no se les da”, explicó ayer su coordinadora, Maria del Mar López-Pinto, que destacó la importancia del arte como “motor transformador” de la sociedad. Además de la exposición, que se podrá ver durante todo el mes de mayo, Binòmica utilizará seis de las obras expuestas para otro proyecto que verá la luz el mes que viene y que consistirá en elaborar seis etiquetas para tres cervezas del territorio: Casa Dalmases, La Vella Caravana y Matoll.

El certamen contará este año con la participación de 16 artistas, elegidos de entre 358. De estos, siete son de Catalunya, tres de otros puntos de España y seis provienen de países como Francia, Belgica, Brasil, Portugal, Italia y Suiza. En concreto, los artistas seleccionados son: Anna Repullo, Dirty, Dante Arcade, Edgar Massegú, Gijs Van Hee, Heléne Planquélle, Ian_Lleida, Kamma Marlo, Mura, Podre, Rame13, Stillo Noir, Sucri i Furyo, Uri Kthr, Wedo Goás y Valentí Gubianas.

Este último dedicará un mural al escritor leridano Josep Vallverdú con motivo del centenario de su nacimiento. De hecho, algunos ya han empezado a pintar las obras que el domingo deberán estar finalizadas. “Buscamos diversidad técnica y visual.

Tenemos estilos de todo tipo: más clásicos, de ilustración y de los años ochenta”, explicó el codirector del Gargar, Jordi Solsona, quien añadió que el pueblo ya suma unos 140 murales. Más allá del arte urbano, durante el fin de semana se han programado talleres de circo, escultura, grafiti, creación textil y estampado dirigidos a niños, así como más de una veintena de conciertos y espectáculos. La oferta se complementará con un mercado de artesanía, cine y la Fira del Roser, entre otras actividades.