Leche materna que salva vidas

Ayudar al desarrollo de los bebés prematuros extremos, de menos de un kilo y medio de peso y que no pueden ser amamantados por sus madres en las primeras semanas. Con este objetivo se creó hace doce años el banco de leche materna de Catalunya, que desde entonces ha distribuido más de 12.400 litros de leche materna entre 5.400 de estos bebés nacidos antes de las 32 semanas de gestación. En Lleida, el año pasado donaron leche un total de veintitrés madres, 264 desde el 2019.

Coincidiendo con el Día Mundial de la Donación de Leche Materna, el Banc de Sang i Teixits organizó ayer una jornada en el hospital Arnau de Vilanova de Lleida para reconocer el esfuerzo de las madres altruistas y promover esta acción solidaria que salva vidas.

“La leche materna disminuye las infecciones generalizadas graves, reduce el tiempo de hospitalización y combate las necrosis intestinales, una de las principales causas de defunción entre los bebés prematuros”, explicó la enfermera del Banc de Sang, Sheila Piñol, al mismo tiempo que hizo un llamamiento para aumentar el número de madres donantes porque “cada día nacen bebés que necesitan esta leche”. Las mujeres interesadas en ser donantes deben estar amamantando a sus hijos desde hace menos de un año y llevar unos hábitos de vida saludables.

“En la delegación del Banc de Sang, en la primera planta del Arnau, les hacemos una analítica, una breve entrevista médica y les explicamos todas las medidas higiénicas que deben seguir para ser donantes”, apunta Piñol, quien destaca que “pueden donar la cantidad de leche que quieran, durante el tiempo que deseen. Nosotros nos encargamos de recogerla a domicilio, la enviamos a Barcelona para su análisis y pasteurización y desde allí se distribuye a todas las maternidades del territorio”.

«Gracias al Banc mi hija siguió creciendo»

“Di a luz a mi hija Valentina el 30 de enero del año pasado, con 25 de semanas de gestación. Yo no tenía mucha leche y me encontraba en un momento muy duro, lleno de preocupaciones por el hecho de no tener a mi bebé conmigo en casa. Gracias a las donaciones de leche materna mi hija siguió creciendo y poco a poco pude dejar la lactancia. Hasta entonces no conocía el banco de leche ni la asociación Alleta y, aunque me sentí muy apoyada por el personal del hospital, me hubiera gustado estar en un grupo con otras madres en el que poder compartir mis inquietudes”.

«Ayudar a otros bebés te llena de satisfacción»

Àgueda Sió es una vecina de Torregrossa se convirtió en donante de leche el pasado mes de octubre, cuando su segunda hija cumplió dos meses. “Yo produzco mucha leche y en alguna clase preparto se mencionó que había la posibilidad de donarla. Empecé a informarme por mi cuenta y así es como contacté con el Banc de Sang. Ahora dono entre 2,5 y 3 litros cada quince días y es una de las mejores experiencias. El hecho de saber que estas ayudando a otros bebés te llena de satisfacción”, explica Sió, que animó a otras madres a “que prueben a ser donantes”.

Grupos de apoyo para facilitar el proceso de lactancia

La asociación Alleta, que lleva más de veinte años trabajando en Lleida, destacó ayer en la jornada la importancia de los grupos de apoyo en lactancia materna.

“En la maternidad y sobre todo con el primer hijo, hay muchas cosas a tener en cuenta que van más allá de la lactancia y que nos pueden preocupar porque no hemos experimentado nunca. Por eso es tan importante apoyarnos unas madres a otras y criar en tribu”, explica Isabel Escuer, la presidenta de esta entidad leridana que cuenta con madres con formación específica sobre lactancia.