Detección aún más temprana

Lleida conmemoró ayer el Día Mundial contra el Cáncer de Mama con la reivindicación de la entidad Adima para ampliar el cribado con mamografía a mujeres de entre 45 y 74 años ya que ahora se limita entre los 50 y los 69 años. Así lo expresaron en el manifiesto que leyó ayer la concejal de Personas Mayores, Salud y Consumo de la Paeria, Anna Miranda, con el que la asociación quiso concienciar, sensibilizar y lograr que más mujeres accedan a las campañas de detección precoz para lograr diagnósticos cada vez más precoces y, por tanto, tratamientos más efectivos.

De hecho, recodaron que el Plan Europeo de Lucha contra el Cáncer ya recomienda este cribado entre los 45 a los 74 años. Al respecto, la presidenta de Adima Lleida, Digna Torres, señaló a este diario que este cribado con mamografías es vital para reducir la mortalidad y aumentar la supervivencia de las pacientes. “Hay muchas mujeres a las que se les diagnostica un tumor de mama antes de los 50 y después de los 60 y, quizá, con esta mamografía, podrían evitar que le extirpen un pecho”, afirmó. 

En este sentido, recordó que ya hay comunidades autónomas que han ampliado la franja de edad. Asimismo, otra de las reivindicaciones de las entidades, tal y como señaló Torres, es la importancia de aumentar la inversión en investigación. “Sin ella no conseguiremos nada”, advirtió, a la vez que insistió en la prevención en la lucha contra un cáncer que representa el 30% del total de tumores diagnosticados a mujeres en Catalunya. Para visibilizar y reivindicar el acompañamiento a las pacientes, sin olvidar que este tumor también afecta a los hombres, Adima instaló una mesa informativa en la plaza Paeria de Lleida para informar a la ciudadanía y recaudar fondos. También la Associació contra el Càncer de Lleida tenía previsto salir a la calle con mesas en Aitona, Albesa, Juneda, Vinaixa, Oliana, La Seu d’Urgell, La Pobla de Segur, El Pont de Suert, Tremp, Sort y Vielha. El año pasado se diagnosticaron unos 400 casos de cáncer de mama en las comarcas leridanas y se detectó una mayor incidencia entre pacientes más jóvenes.

«Nadie te explica que hay un antes y un después de la enfermedad»

Esta vecina de Mollerussa fue diagnosticada de un cáncer de mama a los 47 años. Un año después, le hicieron una mastectomía. Ahora, con el alta médica, considera que está “perfecta” pero advierte de las secuelas que deja la enfermedad. “Nadie te explica que hay un antes y un después, de las secuelas que te quedan aunque en mi caso no tuve que hacer ni quimioterapia ni radioterapia, pero sé lo que eso conlleva porque lo he vivido en mi familia, con mi madre y mi abuela, y también con otras pacientes”, dice. Por ello, aunque hace del sentido del humor su principal aliado, considera que debe hacerse hincapié en cómo afecta la enfermedad. “Me dolían los huesos a causa de las pastillas y cuando dejé de tomarlas me reactivé, pero dejas de ser la misma. También estoy en lista de espera desde hace 6 años para que me arreglen mejor la reconstrucción de mama”, lamenta. Ahora colabora en todo lo que puede con la Associació contra el Càncer.

Conferencia sobre tratamiento y diagnóstico en la Unidad de Mama

El diagnóstico y tratamiento en la Unidad de Mama del Arnau de Vilanova fue el centro del debate ayer en la Sala Sunka de Lleida con una conferencia del doctor Jordi Melé, organizada por la Associació contra el Càncer. En Agramunt, la doctora Antonieta Barahona ofreció una charla sobre alimentación y cáncer, que también dará hoy en la Torre de Capdella. Para hoy, está prevista una sesión de cinefórum en Arbeca y, mañana, la presentación del Calendari Xabel·la en Lleida y la emisión del corto Actos por partes y charla de la doctora Marisa Pon en Àger.

Apoyo psicológico y lucha contra la metástasis, los grandes retos

La Asociación Española contra el Cáncer señaló ayer, en el marco de la campaña El rosa es más que un color, que más del 30% de las pacientes con cáncer de mama atendidas por la entidad sufren ansiedad y estrés y, en un grado superior, malestar emocional como miedo, rabia y frustración. Asimismo, destacó que uno de los grandes hitos conseguidos es que se ha logrado aumentar la supervivencia media del cáncer de mama a cinco años a casi el 90%. Sin embargo, el cáncer de mama metastásico aún tiene mal pronóstico con una tasa de supervivencia de un 25%.