“Hay más abusos fuera de la Iglesia”

Los obispos españoles criticaron el lunes el informe del Defensor del Pueblo sobre la pederastia eclesial afirmando que la “extrapolación” de los datos de la encuesta –que apunta que un 0,6% de la población española mayor de edad ha sufrido abusos en la infancia por parte de sacerdotes o religiosos– “no corresponden a la verdad” y pidieron en este sentido no poner el “foco” solo en la Iglesia, argumentando que la mayor parte de los abusos sexuales a menores tienen lugar en ámbitos distintos al de la Iglesia, como las familias, escuelas o centros deportivos.

Así lo manifestaron al finalizar una asamblea plenaria extraordinaria de la Conferencia Episcopal Española (CEE), presidida por el cardenal Juan José Omella, arzobispo de Barcelona, y en la que participaron un total de 88 obispos, 31 de manera presencial y 57 por videoconferencia. Omella rechazó que se afirme que el celibato predispone al abuso. “Donde más abusos hay es en la familia y no son célibes”, y apostó por la formación integral de los jóvenes, con una dimensión afectivo-sexual y psicológica. El cardenal reconoció que históricamente la Iglesia no ha actuado bien en los temas de abusos, limitándose a apartar a quienes los cometían, trasladándolos de diócesis, “hasta que nos dimos cuenta de que esto era una lacra”. “Hemos aprendido a estar cerca y a escuchar a las víctimas”, subrayó el arzobispo de Barcelona, que admitió que escuchar sus testimonios “pone la carne de gallina”.Asimismo, destacó que el objetivo de la Iglesia es que estos abusos no vuelvan a suceder y, por eso, se han puesto en marcha protocolos. “Desde que hemos tomado conciencia de los abusos, de alguna manera, estos han descendido drásticamente y eso es un buena noticia”, aseguró Omella.Los obispos también se mostraron dispuestos a participar en el fondo económico propuesto por el Defensor del Pueblo para reparar e indemnizar a la víctimas de abusos, pero “solo si se hace para todas las víctimas” y no solo aquellas que los han sufrido en el seno de la Iglesia. Así lo explicó ayer en rueda de prensa el secretario general de la Conferencia Episcopal Española, César García Magán, que defendió que todas las víctimas de abusos sexuales merecen acompañamiento y reparación. “Si solo se tiene en cuenta a las víctimas en la Iglesia, el 90% quedaría excluido y no tendría reparación, serían víctimas de segunda”.

“Los datos de la encuesta no representan a los sacerdotes”

La Conferencia Episcopal (CEE) reiteró su dolor por los abusos sexuales cometidos en la Iglesia y que ha investigado el Defensor del Pueblo en su informe, pero aseguró que la extrapolación de los datos en la encuesta “no corresponden a la verdad ni representan al conjunto de sacerdotes y religiosos”. El secretario general de la CEE, César García Magán, dijo que, de acuerdo con la extrapolación de datos, “habría en España 4,4 millones de personas abusadas. Nos saldría algo tan descabellado como que en casi todas las familias se habría producido un caso de abusos”.