La mujer gitana se reivindica

Ejemplos de lucha y superación para dar voz al empoderamiento de la mujer gitana. Son los que se escucharon ayer en la jornada Trencant barreres, creant futurs, que se celebró en la sala Jaume Magre de Lleida organizada por la Federació d’Associacions Gitanes de Catalunya (Fagic). A través de diferentes ponencias, el público pudo conocer la historia y la cultura del pueblo gitano destacando el papel fundamental de la mujer en la comunidad como “motor de cambio”. 

Gabriel Mendoza, trabajador social de la Fagic, señaló que el objetivo era dar voz a estas mujeres e importancia al papel que tienen en la sociedad. “En las familias que atendemos, vemos que siempre es la mujer el motor de cambio, y queremos transmitir que ellas también pueden con lo que se propongan”, afirmó. Mendoza recordó que la mujer gitana sufre una doble discriminación que afecta a sus oportunidades laborales, formativas y a la autoestima debido al estigma que aún existe en la sociedad. “Con estas mujeres queremos dar ejemplos de que sí se pueden romper barreras”, destacó.

En la inauguración de la jornada, el alcalde de Lleida, Fèlix Larrosa, acompañado por la presidenta de la Associació de Dones Gitanes de Ponent, Paquita Domingo, y el delegado territorial de la FAGIC en Lleida, Josep Roigé, explicó que “debemos tener un plan claro que implique diferentes concejalías para acompañar a las mujeres gitanas a asumir nuevas responsabilidades en emprendimiento”. El alcalde apostó por crear “un itinerario que interpele a las niñas, las jóvenes y las mujeres de la Mariola, por ejemplo, a generar nuevas oportunidades”. 

En la jornada se abordaron diferentes ámbitos como el emprendimiento, la salud y la educación. En el primer ámbito, dieron su testimonio las jóvenes Coral Cortés (ver entrevista) y Desiré Domingo, como emprendedoras. Ambas apuntaron la necesidad de la formación para lograr la estabilidad. “Animo a las jóvenes a seguir estudiando porque es fundamental”, defendieron. Por su parte, Omara Delgado, educadora social de 20 años, ofreció su testimonio como referente para otros jóvenes y recordó la importancia de la formación. “Desde pequeña tuve claro que quería estudiar (mi madre es mi referente) y trabajar con niños y les animo a que ellos hagan lo mismo”, afirmó.

La importancia del cuidado de la salud, otras claves del debate

“Nos enfrentamos a múltiples desafíos”, advirtieron ayer en las jornadas a la hora de hablar sobre salud y bienestar. Principalmente, la ponencia que impartió Alba Fernández, en nombre de Alba Giménez que no pudo asistir, se centró en impulsar el autoestima para cuidarse y poder crecer. “La educación es poder y las mujeres debemos convertirnos en las defensoras de la salud en nuestra comunidad”, defendió. Fernández recordó las desigualdades y faltas de recursos que sufren las familias gitanas y animó a apostar por el cuidado de la propia salud a través del ejercicio y de hábitos saludables, entre ellos la alimentación. Fernández también habló de las barreras a las que se deben enfrentar las mujeres gitanas en el acceso a la educación y cómo se pueden implementar políticas inclusivas para fomentar su participación y éxito académico, luchando contra el absentismo escolar.

«He luchado por romper barreras y lograr mis sueños»

Coral Cortés es una maquilladora profesional de Girona que ayer compartió su experiencia en la jornada. Se casó a los 12 años y tuvo a su hijo a los 14. “Fue mi decisión, mis padres no querían. Y dejé los estudios en 1º de ESO. Pero me gustaba maquillar hasta que mi entorno me animó a que lo hiciera de forma profesional. Me compré un maletín de maquillaje y así empecé”, señaló. Cortés, de 27 años, tiene su propia firma de cosméticos veganos y en enero estrenará su colección de vestidos de novia. “He luchado por conseguir mis sueños y he podido contar con el apoyo de mi familia. Pero he tenido que romper barreras y animo a las jóvenes a que no abandonen los estudios”, afirmó.