Espacios de memoria en Lleida

Preservar la memoria y luchar por no olvidar es una batalla contrarreloj. Y para ello también es importante mantener vivos aquellos espacios que fueron testigos de la historia. En este sentido, la Red de Espacios de Memoria Democrática de Catalunya, del Memorial Democràtic, agrupa un conjunto de lugares que incluyen centros expositivos, patrimonio recuperado como trincheras, búnquers o fosas de la Guerra Civil, hasta rutas de exilio o espacio de resistencia en la Segunda Guerra Mundial. El Memorial detalla en este mapa, publicado en su página web, más de medio centenar de espacios de memoria ubicados en las comarcas leridanas. Desde la Generalitat señalan que hay nuevos espacios que no constan todavía en la web y que otros serán publicados cuando acabe el proceso de ampliación o actualización.

Según la información disponible ahora, de los 53 espacios en la provincia, 36 corresponden a la Guerra Civil; otros seis son de frontera y exilio; seis de la Segunda Guerra Mundial; tres de la lucha antifranquista, y dos, de la Segunda República. Por tipo de enclave, una veintena corresponden a patrimonio recuperado in situ; una docena, a rutas o itinerarios de memoria; siete centros de interpretación como la prisión de Sort o el Espai Lluís Companys; once fosas, y tres monumentos en memoria de deportados a campos de concentración nazis, como Conxita Grangé, con una placa en su casa natal en Espui (La Torre de Capdella) en memoria de la última superviviente catalana del campo de Ravensbrück. 

Entre el patrimonio recuperado destaca el Tossal del Merengue, en Camarasa. En este montículo entre los días 22 y 28 de mayo de 1938, fuerzas de la División del XVII Cuerpo del Ejército Popular Republicano iniciaron una ofensiva para expulsar a los franquistas del Cap de Pont, así como las fosas comunes en El Soleràs, Lleida, Tarrès o Seròs. También destaca la recuperación de búnquers como los de Foradada o refugios como el de la iglesia de Santa Maria d’Agramunt. Entre las rutas resaltan las del Pirineo con el exilio tras el avance de las tropas franquistas o la llegada de perseguidos por los nazis.

“Permiten conocer etapas que han sido silenciadas”

El responsable de la Red de Espacios de Memoria del Memorial Democràtic, Josep Font, aseguró ayer a SEGRE que la divulgación de estos espacios es “una garantía para sensibilizar a la sociedad en relación a la memoria democrática y para conocer las etapas históricas que más han marcado a la sociedad catalana y que han sido silenciadas mucho tiempo. Es importante también que estén en todo el territorio porque permiten captar la realidad de todo el país”. Respecto a las comarcas leridanas, Font remarcó que la señalización de memoria que más predomina está vinculada al frente de guerra como los de la Noguera Pallaresa y el Segre. “Son de una importancia histórica caudal”, aseguró.

En cuanto a si habrá nuevos espacios, Font señaló que el departamento de Justicia, Derechos y Memoria concedió el año pasado subvenciones para hacer actuaciones a los ayuntamientos de Agramunt, Alcoletge, Alfés, Bellpuig, Camarasa, Cervera, Cubells, Foradada, Isona i Conca Dellà, Lleida, Montgai, Soriguera, Sort, Talarn, Torre de Capdella y Vallbona de les Monges, además de al Conselh Generau d’Aran y al consell comarcal de la Alta Ribagorça. “Los ayuntamientos pueden poner en valor y señalizar espacios sin que sea prescriptivo la utilización de la señalización del Memorial Democràtic. No es una obligación”, remarcó. 

Esta señalización siempre ha dado importancia al material gráfico, como fotografías o mapas. “Cuando se crea una nueva se incorporan habitualmente QR para disponer de la información en otras lenguas y también para ampliar los recursos documentales”, explicó Font. En cuanto a los retos, detalló que uno de ellos es que no se trate solo la Guerra Civil, el exilio y la represión, sino también la lucha por la recuperación de los valores democráticos.