INVESTIGACIÓN
La metamorfosis de los insectos revela las claves del paso a la adolescencia, según un estudio
La investigación apunta que el peso es la señal metabólica que determina el inicio de la transición a la edad adulta
Un estudio del Instituto de Biología Evolutiva (IBE) ha determinado que la metamorfosis de los insectos revela las claves del paso a la adolescencia. La investigación concluye que la señal metabólica que determina el paso a la edad adulta es el peso. Tanto en humanos como en insectos, la masa corporal ejerce un papel crucial en el inicio de la transición ya que indica que el sujeto cuenta con las reservas energéticas adecuadas para la reproducción. Los dos procesos están intrínsecamente ligados a la síntesis de hormonas esteroidales. El estudio ha sido publicado recientemente en la revista ‘PLOS Genetics’.
"Comprender la conexión entre la masa corporal y la síntesis de hormonas en insectos nos puede proporcionar pistas sobre el control del inicio de la pubertad y ayudar a establecer terapias para prevenir la pubertad prematura", ha señalado el investigador principal del IBE y coautor del estudio Xavier Franch-Marro.
Para desarrollar el estudio, el equipo del IBE ha manipulado varias vías de señalización del escarabajo de la harina. Fue al inactivar la vía de TGFß (Transforming Growth Factor beta) que observaron que las larvas del escarabajo, en lugar de iniciar la metamorfosis, permanecían en estado juvenil hasta su muerte. Con estos resultados, los investigadores revelaron las vías de señalización que desencadenan la producción de esteroides al final de la etapa juvenil.
Franch-Marro ha explicado que, en humanos, la masa corporal ejerce un papel crucial en el inicio de la transición hacia la edad adulta y ha recordado que hay enfermedades que afectan al peso corporal, como la anorexia o la obesidad, que pueden retrasar o adelantar el comienzo de la adolescencia. "Hemos observado una correlación entre la masa corporal y la activación de estas vías de señalización, por lo cual nos proponemos identificar las proteínas que se expresan con relación al peso corporal", ha apuntado al experto.
En el caso de los insectos, la clave reside en la miostatina, un factor de crecimiento que se origina en los músculos durante su desarrollo y que activa las vías de señalización que desencadenan la metamorfosis cuando se alcanza el peso necesario. "Este factor avisa en el cuerpo que se ha alcanzado un peso óptimo y que puede iniciar la metamorfosis o la adolescencia, en nuestro caso, con las reservas energéticas suficientes", ha explicado al investigador principal del IBE y coautor del estudio David Martín.
"Les vías de señalización responsables de la activación de la metamorfosis en insectos son las mismas que tenemos los humanos. Por eso, estos resultados podrían contener las claves sobre nuestro tráfico a la adolescencia y abrir la puerta a futuras investigaciones en la salud humana", ha concluido Franch-Marro.