MOTOR VEHÍCULOS ELÉCTRICOS
España, a la cola en venta de coches eléctricos según la OCU
España está entre los países de Europa donde menos coches eléctricos se venden según la Asociación de Fabricantes de Automóviles de Europa (ACEA). Entre modelos híbridos y eléctricos apenas se llega al 12% de los coches vendidos en 2023, muy lejos de países como Portugal o Francia.
Los países nórdicos son los que tienen un mayor porcentaje de coches eléctricos nuevos. Todos superan el 33% de las ventas de automóviles, pero destaca especialmente el caso de Noruega, donde 4 de cada 5 automóviles nuevos son eléctricos
Este es el ranking de países donde más coches eléctricos se venden elaborado por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU):
- Noruega, donde el 82,4 % de vehículos que se venden son eléctricos
- Islandia 50,1 %
- Suecia 38,7 %
- Dinamarca 36,3 %
- Finlandia 33,8 %
- Países Bajos 30,8 %
- Luxemburgo 22,5 %
- Suiza 20,9 %
- Austria 19,9 %
- Bélgica 19,6 %
- Irlanda 18,6 %
- Alemania 18,4 %
- Portugal 18,2 %
- Malta 17,3 %
- Francia 16,8 %
- Reino Unido 16,5 %
- Rumanía 10,6 %
- Letonia 8,9 %
- Eslovenia 8,9 %
- Lituania 7,5 %
- Estonia 6,3 %
- Hungría 5,4 %
- España 5,4 %
- Chipre 5,3 %
- Bulgaria 4,8 %
- Grecia 4,7 %
- Italia 4,2 %
- Polonia 3,6 %
- República Checa 3 %
- Croacia 2,8 %
- Eslovaquia 2,7 %
Aumentan las ventas, pero lentamente
En 2023 solo se han vendido un 5,4 % de eléctricos, lo que ya supone una mejora respecto al año anterior (en 2022 el porcentaje fue un 3,8%), pero claramente no aumentan con la rapidez deseada. La OCU esgrime varias razones:
- La escasez de cargadores públicos y las mejoras pendientes para que la red sea más operativa, lo que complica la autonomía y el uso de estos coches en viajes largos.
- Muchas viviendas no cuentan con plaza de aparcamiento propia (más del 60 % del total), lo que hace imposible la instalación de cargadores domésticos.
- A esto hay que sumar otros factores más generales, que también afectan al resto de países, como el incremento del precio de la electricidad o el propio precio de los automóviles eléctricos, que, aunque se ha estancado en los últimos meses, sigue siendo muy elevado.