La mujer de Alves dice que llegó a casa “muy borracho” y “chocando” con los muebles
Los amigos del jugador dicen en el juicio que bebieron alcohol desde la comida hasta la madrugada
La esposa del exfutbolista del Barça Dani Alves, la modelo Joana Sanz, ha asegurado este martes en el juicio por agresión sexual que la madrugada de los hechos, el 31 de diciembre del 2022, él llegó a casa “muy borracho”. Sanz ha explicado que Alves llegó a las 4 de la madrugada “apestando a alcohol” y chocó con un armario y una mesilla y se “desplomó” encima de la cama. Los amigos del jugador que estuvieron con él durante casi todo el día también han explicado que bebieron bastante, intentando reforzar así la tesis de la defensa de que el jugador habría violado a la chica en un importante estado de embriaguez.
Sanz, que se ha mostrado muy fría con su marido, ha declarado en último lugar en la segunda sesión del juicio en la Audiencia de Barcelona. Ha explicado que el día 30 de diciembre Alves había quedado para comer con unos amigos y que teóricamente después la pareja cenaría junta. Ha recordado que su madre estaba enferma. Durante la tarde se enviaron algunos mensajes de Whatsapp y él le dijo que finalmente cenaría con sus amigos. Ella no insistió y ha asegurado que no discutieron, y no hablaron más a partir de las 11 de la noche.
Cuando Alves finalmente llegó a las 4 de la madrugada ella todavía estaba despierta. Cuando lo vio en mal estado decidió no hablar hasta el día siguiente: “No procedía con el estado con que llegó, mejor dejarlo para el día siguiente”. Al día siguiente Alves se levantó tarde y le dijo a su mujer que había estado comiendo y cenando con amigos en un restaurante, sin mencionarle en ningún momento la discoteca Sutton.
El alcohol con los amigos
La versión de Sanz coincide parcialmente con la de los amigos del jugador acusado. Uno de los testigos más esperados de la tarde era el amigo brasileño que acompañaba Alves aquella noche en la discoteca. Ha declarado con intérprete. Ha explicado que el día de los hechos comieron y cenaron con dos amigos brasileños más en un restaurante cerca del Hospital Clínic. Estuvieron hasta la 1 de la madrugada, y acabaron cenando allí mismo. Durante todas aquellas horas vieron cuatro botellas de vino, así como una de güisqui y alguna bebida alcohólica más. Un trabajador y el dueño del restaurante han confirmado que bebieron bastante y salieron “eufóricos” del local. Después fueron a un bar de copas, donde se tomó un combinado cada uno. Finalmente, Alves y el primer amigo fueron juntos al Sutton en coche conduciendo este amigo.
Los otros dos amigos que estuvieron en el restaurante y en el bar de copas con ellos dos también han corroborado esta versión.
Allí Alves y el primer amigo pidieron una botella de cava primero normal y después grande. Preguntado por la cantidad de alcohol que había cogido al acusado a la discoteca, ha dicho que al menos cuatro copas, pero cuando declaró a instrucción dijo que sólo había bebido media. Él ha justificado esta y otras contradicciones con el hecho de que en el juzgado de instrucción declaró sin intérprete y quizás entendió mal la pregunta. De hecho, ha dicho que él condujo tanto a la ida como la vuelta de Sutton porque Alves iba más bebido que él.
Sobre los hechos concretos, ha explicado que cree que las tres chicas se lo estaban pasando muy bien durante la noche y no las vio “incómodas”, como una de ellas declaró este lunes. También vio que Alves y la denunciante bailaban muy cerca el uno del otro. En un momento determinado vio que Alves iba al lavabo y al cabo de poco entraba la denunciante. Al cabo de un rato salió Alves y más tarde la chica. Les tres amigas se despidieron y al cabo de poco él y Alves decidieron marcharse también porque era “tarde” y habían bebido bastante. Ha dicho que no vieron a las chicas al salir.
El responsable de la sala de baile también ha dicho que Alves “no estaba como siempre”, sino que sospecha que había bebido bastante o había tomado alguna cosa. No obstante, eso no lo comentó al director del club nocturno, pero sí a los mossos d'esquadra.