COMERCIO INICIATIVAS
Segunda vida para los objetos
El Mercat del Pla acogió ayer el Mercat de la Resurrecció, con 40 paradistas de todo tipo de productos de segunda mano y antigüedades
La primera edición batió todas las previsiones de público
El Mercat del Pla de Lleida ciudad acogió ayer por la mañana el Mercat de la Ressurrecció, una evento impulsado por un grupo de amigos, con el apoyo de la asociación de comerciantes de la Zona Alta, para que cualquier ciudadano pueda poner a la venta aquellos productos que tiene en casa y que no usa o quiere darles salida. Una iniciativa que en su primera edición rompió todas las expectativas de paradistas y público asistente y en la que se pudieron ver productos de todo tipo: desde vinilos a ropa de otras épocas hasta camisetas de futbol históricas, juguetes, coleccionables, antigüedades y hasta una cría de caimán disecada que fue adquirida hace 40 años en una subasta en un bar de la capital. Dos de sus organizadores son Miquel Ballesté y Domingo Rives, que señalaron que “en un principio íbamos a ser 30 estands, pero debido al interés que suscitó nos llegaron muchas más solicitudes y finalmente hemos podido incluir a 40, aunque algunos se han quedado fuera y ya nos piden que preparemos una segunda edición”. Ballesté y Rives detallaron que todos los paradistas “son particulares que vienen a vender lo que tienen en casa y no quieren, no les interesa conservar o quieren sacar algo de dinero para poder darle una segunda vida y hasta los paradistas están sorprendidos con la respuesta del público, que ha sido fantástica y nos invita a preparar ya la segunda edición”.
Por su parte, un representante de la asociación de comerciantes de la Zona Alta detalló que les han ayudado con todos los permisos y trámites para hacer el mercado y añadió que “el único requisito para ser paradista era que no ofrecieran ni comida ni armas”. Además de las paradas, también se habilitó un espacio para tomar un refrigerio amenizado con música.En cuanto a los paradistas, la mayoría no daba crédito a la afluencia de gente que había ayer en el Mercat del Pla. “Está genial, no pensábamos que vendría tanta gente, se deberían hacer más a menudo eventos de este tipo, dijo Laura Perpinyà, que llevaba un estand de bisutería y coleccionismo de la asociación Ovelles Negres Solidàries Catalunya. “Somos una asociación que ayuda a familias sin recursos y nos financiamos con lo que vendemos y para echar una mano a los más vulnerables”, dijo Perpinyà, que añadió que “una vez acabe el mercado, todo lo que no se quieran llevar los paradistas lo podremos recoger nosotros para donarlo a familias o para financiar la asociación”.Por su parte, Raul Rivas, que ofrecía productos deportivos, señaló que “estos eventos están muy bien para salir de Internet y hacer venta presencial, que es más atractiva, ojalà hagan otra edición del mercado pronto”.