LLEIDA
Mil cien muertes más que nacimientos
La natalidad continúa a la baja en las comarcas leridanas y en 2023 nacieron 3.064 bebés, la cifra más baja en los últimos 25 años
En cambio, según el INE, fallecieron 4.174 personas
Las últimas cifras publicadas por el Instituto Nacional de Estadística (INE) indican que en el conjunto de España los nacimientos han alcanzado la cifra más baja desde 1941. En el caso de las comarcas leridanas, el año pasado vinieron al mundo 3.064 bebés, representando la cifra más baja en los últimos 25 años. Un descenso que contrasta con el aumento de las defunciones, ya que en 2023 fallecieron 4.174 personas, 1.110 más de las que nacieron.
Según los datos del INE, el año pasado la natalidad bajó un 5% respecto a 2022 y no ha parado de caer en los últimos años. Si se compara con el primer año de la serie histórica, que es 1975, el descenso en el número de nacimientos es del 40% en la provincia de Lleida. De hecho, 2008 fue el último ejercicio en el que se superaron los 5.000 recién nacidos. Al analizar la estadística, también se desprende un cambio en la edad de las madres, que cada vez es más alta. En 2023, el 9,5% del total de mujeres que dieron a luz tenían 40 años o más, porcentaje que hace medio siglo era de solo el 3,7%. Concretamente, el año pasado 293 madres estaban en la franja a partir de los 40 años, de las que 42 eran a partir de los 45. En cuanto a las jóvenes, un 12,5% de las mujeres que dieron a luz el año pasado tenían menos de 25 años, mientras que en 1975 este porcentaje superaba el 32% del total. Otro cambio sociodemográfico es que han aumentado las madres no casadas, aunque sin llegar a ser más que las casadas como sí se registró en España por primera vez en 2022. En las comarcas leridanas, en veinte años han aumentado un 87% las mujeres solteras que dan a luz.
En el conjunto del Estado, el año pasado se registró la cifra más baja de nacimientos desde 1941
Asimismo, según el INE, las muertes han bajado en Lleida tras el repunte registrado en los años de la Covid. Así, en 2023 fallecieron 4.174 personas, un 8% menos que el año anterior. Sin embargo, pese a la caída de la mortalidad, el menor número de nacimientos hizo que el saldo vegetativo siga en números rojos y el año pasado murieron 1.110 personas más de las que nacieron. Los años de pandemia fueron los más importante en número de defunciones y en 2020 murieron 4.188 personas en la provincia, la cifra más alta de la serie (desde 1975).