La cantante Françoise Hardy, icono de la música francesa, muere a los 80 años
La cantante Françoise Hardy, icono de la música francesa desde los años 60 que se hizo famosa en todo el mundo, ha muerto a los 80 años, según ha anunciado esta noche su hijo, el también cantante Thomas Dutronc.
"Mamá se ha ido...", ha dicho Dutronc en un escueto mensaje en Instagram, acompañado de una foto de su madre con él cuando era un bebé.
Hardy se hizo famosa en 1962, con solo 18 años, gracias al tema Tous les garçons et les filles que ella misma compuso, y que le propulsó al estrellato desde un programa de televisión para jóvenes talentos. A partir de entonces, publicó un total de 28 discos, tres de ellos en inglés, y siguió en activo hasta que la enfermedad se lo permitió. Su último álbum apareció en 2018.
Ella componía la mayor parte del material que cantaba, algo muy poco habitual en la época, y lo interpretó en varios idiomas, lo que le hizo famosa desde Estados Unidos a Japón, e incluso versionada por artistas admiradores en los años 80. También fue una musa del diseñador de moda de origen español Paco Rabanne, fallecido el año pasado.
Hardy sufrió primero un cáncer linfático, en 2004, del que se recuperó, y luego uno de laringe, desde 2015. En los últimos años se había convertido en una defensora del derecho a la eutanasia, todavía no reconocido en Francia, y sobre el que un proyecto de ley está tramitando ahora en la Asamblea Nacional.
En diciembre pasado, la intérprete y compositora, dijo en algunas entrevistas que deseaba "marcharse pronto y rápido", e hizo un llamamiento al presidente Emmanuel Macron para que "hiciera posible" el derecho a la eutanasia.