Cláusula contra la inteligencia artificial al concurso de carteles por la Fiesta Mayor de Alcarràs
El concurso incluye por primera vez una condición de originalidad. ¿Pero sería capaz, el jurado, de saber si una obra está hecho con IA o no?
El Ayuntamiento de Alcarràs ha anunciado la apertura de la convocatoria para el concurso de carteles de la Fiesta Mayor de verano, que se celebrará la última semana de agosto. El concurso, que ya es una tradición en la preparación de las fiestas y ofrece la posibilidad de ganar premios en tres categorías (adultos, jóvenes y niños) incluye por primera vez una cláusula especial: no se aceptarán carteles hechos con inteligencia artificial (IA), una medida que busca garantizar la originalidad y la creatividad humana en las obras presentadas.
El concurso acepta obras realizadas con cualquier técnica, ya sea pintura, ilustración, fotografía, collage, entre otros. No obstante, el Ayuntamiento de Alcarràs ha puesto especial énfasis en una norma clave: no se aceptarán carteles hechos a través de inteligencia artificial (IA). Esta decisión refleja el compromiso de la institución, dicen, con la originalidad y la creatividad humana, asegurando que las obras presentadas sean fruto del esfuerzo y el talento de los participantes.
Para participar en el concurso, los interesados tienen que presentar sus propuestas a través de la instancia específica disponible en la Seu Electrònica del Ayuntamiento de Alcarràs, donde también se pueden consultar las bases completas del concurso. Así, el Ayuntamiento garantiza un proceso transparente y accesible para todos los creadores.
Esta iniciativa no sólo celebra la Fiesta Mayor, sino que también promueve el arte y la cultura, reconociendo el talento local y ofreciendo una plataforma para la expresión creativa libre de la influencia de tecnologías como la inteligencia artificial.
Polémica en Lleida con carteles hechos (supuestamente) con IA
Al principio de año SEGRE explicaba que el cartel de la Fiesta de Moros y Cristianos de Lleida del 2024 había seleccionado una obra de un artista más que conocido, de Murcia, Rubén Lucas García, que ya ganó este concurso en el 2015, el 2018 y el 2019.
Lucas García es un autor que arrastra desde hace unos años una polémica, que se visualiza sobre todo en el mundo de las redes sociales, donde se suben las voces que lamentan que a sus carteles, o para elementos que contienen, utiliza herramientas digitales de inteligencia artificial (IA).
De hecho, sólo hace falta una simple búsqueda con su nombre en Google para descubrir decenas de noticias sobre los numerosos concursos que ha ganado los últimos años por toda la geografía española. Incluso en alguna web se informa de que Lucas ha ganado 170 concursos de diseño y carteles los últimos cinco años con obras creadas con ayuda de la IA y con la cual se ha embolsado 115.000 euros en total.
¿Se puede saber, si una obra está hecha con IA?
La premisa de la convocatoria es clara, que no lícita: no queremos carteles con IA. ¿Pero será capaz, el jurado del premio de Alcarràs, para saber si una obra está hecha o no, con IA?
No. Al menos no de una forma rápida ni fácil, y es que la IA ha dado un salto cualitativo tan grande en los últimos tiempos (meses) que los problemas detectables hasta hace poco (demasiadas dedos en las manos o formas extrañas) ya han quedado hoy superados. A pesar de eso, un ojo experimentado podría ver si hay errores sutiles o inconsistencias que un diseñador humano probablemente evitaría, como sombras y reflejos que no acaban de coincidir. Los patrones de las texturas, si son excesivamente repetitivos, también pueden dar alguna pista, así como la inclusión de tipografías y textos, a menudo con errores gramaticales u ortográficos.
Así, hoy hay herramientas y programas en línea que permiten determinar la probabilidad de que una obra haya sido hecha con IA, pero no deja de ser un número de probabilidad.
La forma definitiva, eso si, es pedir al autor original las pruebas gráficas de que, efectivamente, ha sido el autor real. Pruebas como archivos en bruto de programas de edición, metadatos de las fotografías o esbozos previos.
En todo caso, todo eso abrirá un debate entre defensores y detractores de las inteligencias artificiales en la parte del proceso de creación de contenido.