CERTÁMENES CULTURA Y PATRIMONIO
Música y emociones en l'Horta
Grenyana puso fin ayer a la segunda edición del festival cultural y agroturístico L'Art a l'Horta
Propuestas como Queralt Lahoz o una función de funambulismo atrajeron a todo tipo de público
El concierto de Queralt Lahoz el sábado por la noche atrajo a una gran cantidad de público joven. - PAU PASCUAL PRAT
El concierto de Queralt Lahoz el sábado por la noche atrajo a una gran cantidad de público joven. - PAU PASCUAL PRAT
El concierto de Queralt Lahoz el sábado por la noche atrajo a una gran cantidad de público joven. - PAU PASCUAL PRAT
El concierto de Queralt Lahoz el sábado por la noche atrajo a una gran cantidad de público joven. - PAU PASCUAL PRAT
El concierto de Queralt Lahoz el sábado por la noche atrajo a una gran cantidad de público joven. - PAU PASCUAL PRAT
El concierto de Queralt Lahoz el sábado por la noche atrajo a una gran cantidad de público joven. - PAU PASCUAL PRAT
La edición veraniega del festival cultural y gastroturístico L’Art a l’Horta concluyó ayer en Grenyana con una gran variedad de propuestas artísticas gratuitas. Desde el sábado, la Ermita de la Mare de Déu de Grenyana acogió el certamen, coorganizado por el Auditori Municipal Enric Granados y el Teatro del Escorxador de Lleida, que tenía por objetivo poner en valor la tierra, el entorno y la naturaleza de l’Horta leridana.
Entre las propuestas, destacó la actuación de la cantante de Santa Coloma de Gramenet Queralt Lahoz el sábado por la noche, que fue todo un éxito de público. “Nos visitó mucha gente joven, algo que celebramos porque nos gusta llegar a perfiles nuevos”, aseguró Purificació Terrado, directora del Auditori Municipal Enric Granados. “Al principio, la logística nos preocupaba un poco”, reconoció Terrado, que añadió: “El acceso a la Ermita era complicado, ya que el camino es muy estrecho”. Para resolverlo, el festival habilitó una línea de autobús lanzadera que hizo varios viajes desde el centro de la ciudad hacia Grenyana y viceversa.El diseño de los escenarios corrió a cargo del arquitecto Josep Maria Puigdemasa, que procuró aprovechar el espacio natural de la Ermita. Así, el espectáculo de funambulismo de la compañía gerundense La Corcoles amb H pudo realizarse bajo la sombra de un álamo de unos 25 metros, para resguardar del calor tanto al público como a los artistas.La protagonista de la exhibición, Mariona Moya, se mostró agradecida con la organización del certamen, puesto que “es una disciplina que ha quedado un poco olvidada porque es compleja en cuanto a estructura”. Sin duda, fue una de las actuaciones con las que más conectó un asombrado público, que dedicó sus aplausos y demostró su admiración por las demostraciones de la funambulista.