Contra el silencio del suicidio

Medio centenar de personas se congregaron ayer en la confluencia de las calles Carme y Magdalena de Lleida para participar en el acto reivindicativo y de homenaje con motivo del Día Internacional para la Prevención del Suicidio, organizado por el Servei de Suport al dol de Ponent. Por segundo año consecutivo, entidades, familiares e instituciones se unieron para recordar a las personas que han muerto por suicidio con una ofrenda floral y un minuto de silencio. En el acto, la presidenta de la entidad, Myriam Lorenzo, señaló que “el duelo por suicidio es muy devastador y estigmatizado” y reivindicó la necesidad de “visibilizar, ya que esto ayuda a que haya menos muertos”. Por su parte, Begoña Giménez, coordinadora de la asociación, destacó que “es importante dar información, ya que no hay edades ni clases sociales, nos puede afectar a todos y todos podemos aportar nuestro granito de arena” y animó a hablar de forma abierta, entendiendo la realidad, acompañando y huyendo de los falsos mitos y el estigma. Para ello, señaló que es urgente “una intervención decidida por parte de la administración, que las palabras vayan acompañadas de un presupuesto necesario para poder llevar a cabo los proyectos de prevención que se necesitan”. Entre los colectivos más vulnerables, Giménez apuntó a los jóvenes pero también a las personas mayores debido al aumento de la soledad no deseada.

Durante el acto, la entidad presentó la campaña “Trobarem raons per viure” con el objetivo de implicar a la ciudadanía en la prevención “iniciando una conversación, ayudando a buscar una salida alternativa o pidiendo apoyo profesional”, explicó Giménez. Esta campaña quiere seguir la línea de “Canviem la narrativa sobre el suïcidi”, el lema de la conmemoración de este año y que defendieron ayer en la lectura del manifiesto. En él, se insta a “transformar la cultura del silencio hacia un espacio que implique más comprensión, empatía y apoyo”. Uno de los momentos más emotivos fue la intervención de Alba Riera y Eva González, familiares de personas fallecidas por suicidio. En sus escritos, reivindicaron la necesidad de que los profesionales de la salud “acompañen a los que sufren” y la “importancia de hablar y escuchar a los que piden ayuda a gritos y aquellos que lo hacen en silencio”. “Aunque sea una palabra que nos dé miedo, no debemos evitarla, porque con el silencio, a veces, muere más gente”, remarcaron. Por su parte, Raúl Llevot, director de los servicios territoriales de Salud en Lleida; el diputado de Salut Pública de la Diputació, Òscar Martínez, y la concejala de Salud de la Paeria, Anna Miranda, recordaron el apoyo de sus adminstraciones a la prevención. Según el INE, el año pasado 31 personas fallecieron por suicidio en las comarcas leridanas, frente a las 29 de 2022. En Catalunya se quitaron la vida 626 personas.

Un hombre se quita la vida en una plaza de la Mariola

Un hombre de unos 50 años se quitó la vida ayer por la mañana en la plaza Riu Flamisell, en el barrio de la Mariola. Los servicios de emergencia fueron alertados minutos antes de las 9.00 horas y hasta el lugar acudieron patrullas de la Guardia Urbana y de los Mossos d’Esquadra y ambulancias del Sistema d’Emergències Mèdiques (SEM). No pudieron hacer nada para salvarle la vida. Los Mossos d’Esquadra se hicieron cargo de la investigación del suceso, determinando que se trataba de una muerte por suicidio.