Broche a unas fiestas seguras

Los fuegos artificiales cumplieron ayer con la tradición de poner el broche de oro a cuatro días de las Festes de la Tardor en honor a Sant Miquel. Festejos que, según destacó la Paeria, contaron una alta participación por parte de la ciudadanía y que transcurrieron de forma “tranquila, cívica y segura”, sin incidentes graves, tras el incremento de la vigilancia por parte de la Guardia Urbana y los Mossos d’Esquadra. El concejal de Juventud y Fiestas, Xavi Blanco, señaló que “hemos logrado ofrecer a la ciudadanía un Centro Histórico transitable, con gran diversidad de escenarios, estilos musicales y públicos”, además de destacar que se ha apostado de nuevo por dar voz al talento local.

En la última jornada, la música, el baile y las actividades familiares volvieron a ser las protagonistas. Uno de los actos que congregó más público fue el espectáculo itinerante Àcid de Sound de Secà, que arrancó en el Pati de les Comèdies hasta acabar en la plaza del Dipòsit con una propuesta que combinaba la percusión, el teatro, el movimiento y la voz que hizo bailar a mayores y pequeños a ritmo de funky y hip-hop. Mientras, en el foso de la Seu Vella se celebró el último vermut electrónico y la pista de la Panera acogió otro más tradicional de la mano de la orquesta Banda Sonora. También en la plaza del Dipòsit el público pudo disfrutar de la propuesta familiar Puja aquí dalt i balla, de Pep López i Sopars de Duro. Asimismo, se celebró el XVII Concurs de Pintura Rápida Memorial Roig Nadal y el XI Concurs de Pintura Ràpida Memorial Roig Nadal en la categoría infantil, con la entrega de premios en el Magatzem de Cultura de los Armats de Lleida. Otras actividades fueron Carta triada, carta encertada, organizada por el Museu de Lleida, y el taller de circo en la plaza de l’Ereta. Por la tarde, la plaza Sant Joan acogió el Ball de Festes de la Tardor con la orquesta Saturno; la pista de la Panera contó con la Ballada de Sardanes con la Cobla Vents de Riella, y en la plaza del Dipòsit se bailó con los Blanquers del Jazz. De noche, la Pirotècnia Catalana, de Vimbodí, iluminó el cielo de Lleida con su propuesta de luz, color y formas pirotécnicas desde el margen izquierdo del río Segre y que siguieron desde diferentes puntos, como los puentes, centenares de leridanos.

“El Centro Histórico ha sido el espacio ideal para la celebración”

En el balance que hizo la Paeria de las Festes de la Tardor, el alcalde de Lleida, Fèlix Larrosa, destacó que, una vez más, “hemos vuelto a poner el Centro Histórico como un espacio ideal para la celebración y para la proyección del talento local”. Asimismo, remarcó que la elección de la plaza del Dipòsit, junto a la pista de la Panera, como espacios neurálgicos, “ha sido muy bienvenida por parte de la ciudadanía”. Por su parte, la concejala de Feminismos, Carme Valls, señaló la “gran aceptación” y la “gran demanda” del autobús nocturno de la L7, que se ha ofrecido de forma gratuita durante las fiestas, con unos 900 usuarios, la mayoría mujeres. Sobre los puntos Lila Rainbow, Valls dijo que se atendieron “entre dos y tres incidentes” pero quiso destacar el número de jóvenes que se acercaron para solicitar información, “lo que indica que hay voluntad y conciencia de acabar con esta lacra”, en referencia a las violencias machistas y LGTBIfòbicas. Mientras, la concejala de Seguridad, Cristina Morón, afirmó que la presencia “intensiva” de Guardia Urbana y Mossos d’Esquadra “ha permitido unas fiestas tranquilas y seguras”, con 8 detenciones y 12 actuaciones por tenencia de armas blancas (más información en página 14).