Los cementerios de toda la provincia de Lleida se llenaron para cumplir con la tradición de Tots Sants

Multitud de leridanos se desplazaron ayer a los cementerios de sus localidades para recordar a los seres queridos que ya no están, cumpliendo así con la tradición de Tots Sants. En la capital del Segrià, la constante amenaza de lluvia no impidió que los pasillos del camposanto se llenaran por la mañana de cientos de familias que paseaban y rendían homenaje a sus difuntos con ofrendas florales. Un día nublado y gris en el que destacaban, todavía más, los coloridos arreglos florales que decoraban cada rincón del recinto. Aitana Vera, de La Florista del cementerio de Lleida, explicaba que “desde el martes estamos trabajando a pleno rendimiento. Estamos vendiendo un poco de todo, aunque los claveles y las rosas son siempre las flores más demandadas”. 

Coincidiendo con la celebración del día de los difuntos, el Ateneu La Baula organizó una ofrenda floral en recuerdo a las víctimas de la Guerra Civil y la represión franquista. Una decena de personas participaron en el homenaje, que comenzó en el espacio de memoria dedicado a los leridanos que perdieron la vida en los campos de concentración nazis. La visita por el camposanto continuó en el monumento en recuerdo de las víctimas de los bombardeos de 1937 y 1938 y finalizó frente al muro dedicado a los muertos por la represión franquista.

En Tàrrega, el consistorio habilitó de nuevo un servicio extraordinario gratuito del autobús urbano para facilitar los desplazamientos al cementerio, situado al extremo este del núcleo urbano. Entretanto, los escoltes vendieron castañas asadas en las puertas del camposanto. 

Desde hace años, en algunas localidades la música acompaña a los visitantes que acuden a los camposantos para recordar a sus difuntos. Es el caso de Torrelameu, Cervera, Aitona o Tremp. En este último hubo un concierto de violín y piano de la mano de Norbert Llorca y Xavier Pinyol.

Por su parte, el consistorio de Golmés inauguró un monumento dedicado al duelo perinatal, un espacio dedicado al recuerdo y apoyo a las familias afectadas. El acto contó con el acompañamiento musical de la violinista Mireia Solos y fue presidido por el alcalde, Jordi Calvís, que pidió un minuto de silencio en memoria de las víctimas de València.