La mejor forma de cortar y conservar el jamón ibérico esta Navidad

La Navidad ya está aquí, y con ella llegan las esperadas reuniones familiares y cenas repletas de sabores tradicionales. Y si hay un protagonista indiscutible en estas fiestas es, sin duda, el jamón ibérico. Este manjar está presente en prácticamente todas las mesas de los hogares españoles durante esta época. Pero, además de saborearlo, ¿qué tal si aprendemos a cortarlo y conservarlo como auténticos profesionales? 

La importancia de las herramientas adecuadas

Antes de empezar, es fundamental contar con el equipo necesario. Un buen jamonero que mantenga la pieza firme y estable es esencial. Además, necesitarás un cuchillo bien afilado. Los expertos recomiendan el cuchillo jamonero para cortar lonchas finas, aunque si te asusta usar uno tan afilado, puedes optar por un cuchillo de punta redonda. Y no olvides el cuchillo de puntilla, ideal para limpiar el jamón y trabajar cerca del hueso.

Preparación inicial de la pieza

Coloca el jamón con la pezuña hacia arriba y realiza un corte profundo con el cuchillo de puntilla justo debajo del codo, trazando una línea hacia la punta del hueso. Retira la corteza y la grasa amarillenta solo en la parte que vayas a consumir. Guarda un buen trozo de grasa para cubrir el jamón posteriormente y mantenerlo jugoso.

Las zonas clave del jamón

Los maestros cortadores distinguen tres partes principales en el jamón: la babilla, la maza y la punta. Si quieres que se conserve por más tiempo, empieza cortando por la babilla, que es la parte más estrecha. Si vas a consumirlo rápidamente, comienza por la maza, que es la más jugosa. En cuanto a las lonchas, se recomienda hacerlas más pequeñas que una tarjeta de crédito para que se derritan en la boca y liberen todo su sabor.

Seguridad al cortar

Al cortar el jamón, es crucial mantener la mano que no usas para cortar siempre detrás de la zona de corte, nunca por delante del cuchillo. Esta mano "salva el peligro" y debe permanecer en la parte trasera. Cuando llegues al hueso de la cadera, rodéalo con el cuchillo de puntilla para continuar el corte. Y no olvides calcular bien las raciones: unos 100 gramos para cuatro personas es lo recomendado.

Claves para conservar el jamón en perfecto estado

El jamón ibérico debe guardarse en un lugar fresco y seco, idealmente en una bodega si se dispone de ella. La temperatura óptima oscila entre los 20 y 23 °C. Para evitar la oxidación, cubre el jamón con los trozos de grasa reservados o con un paño limpio, pero evita el papel de aluminio, que puede deteriorarlo con el tiempo.

Aunque el jamón no tiene fecha de caducidad, una vez abierto es mejor consumirlo en un mes. Si prevés que no se terminará en ese plazo, una opción es laminarlo todo y envasarlo al vacío. En las charcuterías especializadas pueden realizar este proceso por unos 60 euros, permitiendo conservar el jamón en perfecto estado durante varios meses.

El jamón ibérico, estrella de las celebraciones navideñas

Siguiendo estos consejos podrás disfrutar del jamón ibérico en todo su esplendor durante estas fiestas. Aplica estas técnicas y sorprende a tus invitados convirtiéndote en el maestro cortador de tu hogar. Deja que este manjar sea el gran protagonista de tus celebraciones navideñas.

El jamón ibérico es uno de los productos gastronómicos más apreciados y representativos de España. Se obtiene de cerdos de raza ibérica, criados en libertad en dehesas de la península. Las principales zonas productoras se encuentran en Andalucía, Extremadura y Castilla y León. Existen diferentes categorías de jamón ibérico según la alimentación y el porcentaje de raza ibérica de los cerdos, siendo el jamón ibérico de bellota 100% ibérico el más valorado y exquisito.