El pueblo de Lleida donde se encuentra el 'corazón' de Cataluña y el restaurante más antiguo del país, con más de 500 años de funcionamiento ininterrumpido

El centro geográfico de Cataluña se encuentra en un lugar poco conocido para muchos: el municipio de Pinós, situado en el sur de la comarca del Solsonès. Este punto emblemático, que se encuentra muy cerca del Santuari de Pinós, marca el corazón de Cataluña. Aunque su ubicación exacta ha sido objeto de varios cálculos a lo largo del tiempo, la señalización del centro geográfico se encuentra en un lugar con vistas privilegiadas que ofrecen una panorámica espectacular del territorio que rodea este municipio.

Una espina dorsal entre cuencas

La parte central del término municipal de Pinós es una auténtica espina dorsal natural, con una altitud que oscila entre los 700 y los 800 metros. Este punto elevado actúa como una línea divisoria entre dos importantes cuencas hidrográficas: la del Llobregat, que desemboca en la costa, y la del Segre, que sigue hacia el interior de la península. Desde este punto privilegiado, se pueden contemplar vistas excepcionales de las montañas y valles que configuran la geografía catalana, desde las tierras más planas hasta las cumbres de las sierras.

Un municipio con cinco núcleos

Pinós es un municipio peculiar que se compone de cinco núcleos diferentes: Ardèvol, Vallmanya, Sant Just d'Ardèvol, Pinós y Matamargó. Esta diversidad dota el municipio de una riqueza paisajística, cultural e histórica única, donde cada núcleo aporta su propia identidad. Les suyas tradiciones, leyendas y costumbres ayudan a definir el alma de este territorio, que conserva su carácter rural y auténtico.

Un santuario con vistas privilegiadas

Muy cerca del centro geográfico de Cataluña se alza el Santuario de Pinós, un enclave histórico y espiritual que ofrece unas vistas extraordinarias del entorno natural. Este lugar de culto, rodeado de naturaleza, es un verdadero mirador que permite disfrutar de la paz y la tranquilidad del paisaje. Desde la zona del santuario, se pueden observar las montañas y valles de las tierras próximas, siendo un espacio ideal para la contemplación y la conexión con la naturaleza.

El Hostal de Pinós: 500 años de servicio al viajero

El Hostal de Pinós, que empezó como un modesto albergue para viajeros justo en medio de Cataluña en 1524, sigue sirviendo comidas cada día, excepto los martes, en un entorno privilegiado. A lo largo de los siglos, el hostal ha evolucionado, sustituyendo las antiguas camas de paja por mesas donde se ofrecen desayunos y platos típicos a una clientela fiel, así como a visitantes de temporada y senderistas.

Una invitación a descubrir el corazón de Cataluña

Visitar Pinós y su centro geográfico es una experiencia que combina naturaleza, historia y espiritualidad. Es una oportunidad para adentrarse en el corazón de Cataluña, descubrir paisajes sorprendentes y conectar con la esencia del territorio. La señalización del centro geográfico, que consiste en un edículo con una rosa de los vientos cortada en un bloque de piedra, hace de este lugar una referencia simbólica y cultural. Esta rosa de los vientos, que incorpora varios símbolos de Cataluña, fue esculpida el año 1993 por el albañil y picapedrero Jaume Palou d'Ardèvol, aportando un toque artístico que complementa perfectamente el paisaje natural.

Un debate sobre su ubicación exacta

A lo largo del tiempo, varios cálculos han intentado determinar la ubicación exacta del centro geográfico de Cataluña. Los cálculos más antiguos lo situaban en Massoteres, en la comarca de la Segarra, o en el Cogulló de Cal Torre, en el Bages. No obstante, los cálculos más recientes realizados por el Instituto Cartográfico de Cataluña lo sitúan a sólo 4,8 kilómetros del punto señalizado en Pinós, más concretamente a las coordenadas 377471.01 m (1º31'30"E) de longitud y 4628524.42 m (41º47'54"N) de latitud, en un lugar conocido como Cuiner. Este punto, que también se encuentra dentro del término de Pinós, es un lugar que conserva su esencia rural y natural.