Los vapers serían igual o más perjudiciales que los cigarrillos convencionales, según un estudio
Una investigación en Reino Unido advierte que el vapeo podría aumentar el riesgo de enfermedades cardiovasculares y demencia, desmintiendo la idea de que es una alternativa segura al cigarrillo tradicional

Imagen de archivo de una mujer fumando un cigarrillo electrónico.
Un reciente estudio llevado a cabo en el Reino Unido ha revelado que los cigarrillos electrónicos o vapers podrían ser igual o incluso más perjudiciales para la salud que los cigarrillos tradicionales. La investigación, liderada por Maxime Boidin en el Hospital Metropolitano de Manchester, sugiere que estos dispositivos aumentarían el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares y demencia, desafiando así la narrativa impulsada por la industria del vapeo que los presenta como una alternativa de "daño reducido".
El estudio analizó a participantes de entre 18 y 45 años con niveles de condición física similares, a quienes se les sometió a pruebas de esfuerzo para medir la elasticidad de sus vasos sanguíneos y el flujo de sangre hacia el cerebro. Los resultados mostraron que tanto el vapeo como el tabaco provocan un daño similar a las paredes arteriales, lo que puede derivar en problemas cardiovasculares. Además, se observó que el vapeo afecta el flujo sanguíneo de manera similar al cigarrillo convencional, lo que podría incrementar el riesgo de deterioro cognitivo y demencia a largo plazo.
Según Boidin, estos efectos negativos del vapeo podrían estar relacionados con la inflamación provocada por la nicotina, combinada con la presencia de metales y químicos en los líquidos utilizados en los cigarrillos electrónicos. El investigador también ha señalado que parte del problema radica en la naturaleza compulsiva y continua del vapeo, ya que a diferencia del cigarrillo convencional, que requiere pausas para encender cada pitillo, los cigarrillos electrónicos permiten una inhalación constante de nicotina y otras sustancias dañinas sin interrupción, facilitando así un consumo descontrolado.
Nofumadores.org advierte sobre los riesgos del vapeo
Ante estos hallazgos, la asociación Nofumadores.org ha instado a las autoridades sanitarias a tomar medidas urgentes para frenar la expansión del vapeo, especialmente entre los jóvenes, y evitar que España siga el mismo camino que el Reino Unido. En dicho país, más de un millón de personas no fumadoras han desarrollado adicción a la nicotina a través del vapeo, además de multiplicarse por siete el número de usuarios de cigarrillos electrónicos en los últimos tres años.
Raquel Fernández Megina, presidenta de Nofumadores.org, ha alertado sobre la desinformación difundida por la industria del tabaco y la nicotina sintética, afirmando que "la idea de que el vapeo es un 95% más seguro se basa en un estudio plagado de conflictos de intereses". Además, ha advertido que España se encuentra "en el mismo camino si no se toman medidas urgentes", ya que en los últimos cuatro años se ha duplicado el uso de estos dispositivos y un 54,6% de jóvenes de entre 14 y 18 años los han probado.
Medidas propuestas para frenar el consumo de cigarrillos electrónicos
Entre las medidas propuestas por Nofumadores.org para hacer frente a esta problemática se encuentran:
- Equiparar la fiscalidad de estas nuevas formas de consumo de tabaco y nicotina con las del tabaco tradicional.
- Prohibir su publicidad, promoción y consumo en redes sociales.
- Vetar su venta a través de internet y máquinas expendedoras.
- Prohibir su consumo en los lugares donde ya está prohibido fumar.
Fernández Megina ha subrayado la urgencia de la situación, señalando que "cada minuto que perdamos en poner en marcha una legislación que frene este aumento exponencial del consumo de cigarrillos electrónicos, bolsas de nicotina y tabaco calentado, será tiempo que gana la industria del tabaco y la nicotina para enganchar a toda una nueva generación de jóvenes a sus letales productos".
¿Qué son los cigarrillos electrónicos o vapers?
Los cigarrillos electrónicos, también conocidos como vapers o e-cigarettes, son dispositivos que vaporizan una solución líquida para ser inhalada. Estos líquidos suelen contener nicotina, así como otros componentes como propilenglicol, glicerina vegetal, aromatizantes y aditivos. Fueron introducidos en el mercado como una alternativa supuestamente menos dañina al tabaco convencional, pero estudios recientes han puesto en duda esta afirmación y han alertado sobre sus potenciales riesgos para la salud.
Otros estudios sobre los riesgos del vapeo
La investigación liderada por Maxime Boidin no es la única que ha señalado los peligros asociados al uso de cigarrillos electrónicos. Nofumadores.org también ha recordado las conclusiones de otro estudio reciente realizado en la Universidad de Ohio State (Estados Unidos), que aseguraba que los fumadores duales, es decir, los que combinan el consumo de cigarrillos con el de vapers, tienen hasta 40 veces más probabilidades de desarrollar cáncer de pulmón respecto a una persona que no fuma.
Estos hallazgos se suman a la creciente evidencia científica que cuestiona la seguridad de los cigarrillos electrónicos y resalta la necesidad de implementar medidas regulatorias más estrictas para proteger la salud pública, especialmente la de los más jóvenes, que son el principal objetivo de la industria del vapeo.