María Castro reflexiona sobre la maternidad: "No soy la misma de antes, pero tampoco quiero serlo"

María Castro, conocida por su papel en Sin tetas no hay paraíso, es actriz, influencer, defensora de los derechos de las mujeres y niños, y madre. Con tres hijas, la más pequeña de solo cuatro meses, ha vuelto al trabajo en La Promesa, una serie de éxito donde interpreta un papel clave.

La actriz ha formado una hermosa familia junto a su esposo, José Manuel Villalba, y mantiene una relación cercana con sus compañeras de La Promesa, como Ana Garcés y Sara Molina, con quienes comparte momentos de diversión. Tras convertirse en madre de tres, María ha reflexionado sobre los cambios físicos y emocionales que ha vivido después de sus embarazos, compartiendo sus pensamientos en redes sociales.

En un reciente video de Instagram, grabado con la ayuda de su sobrina, María se sinceró sobre cómo se percibe ante la cámara. Al observarse, notó que su cuerpo ya no es el mismo de antes y se preguntó si realmente quiere volver a ser como era antes. "¿Realmente quiero ser la de antes?" expresó, cuestionando la presión social sobre la apariencia física post-embarazo.

Este cambio de perspectiva la ha llenado de orgullo, reconociendo el valor de la familia que ha construido con sus hijas Maia, Olivia y Emma. Fiel a su autenticidad, María compartió un mensaje inspirador con sus seguidores, animando a las futuras madres a apreciar sus cuerpos no solo por su apariencia, sino por lo poderosos que son. "Los cuerpos no son solo para admirar... ¡son para usarlos bien!".

Además, enfatizó que los cambios no son solo físicos, sino también mentales, y que esto forma parte del proceso natural de la vida. Desde la llegada de Maia en 2020, tanto su cuerpo como su vida han cambiado, algo que cualquier madre puede entender.

María también reflexionó sobre la presión social de "tener hijos sin que se note", criticando las expectativas de mantener la misma apariencia y estilo de vida después de la maternidad. La actriz subrayó que la vida cambia inevitablemente con la llegada de los hijos y, aunque puede ser difícil, cada momento vale la pena.

Finalmente, María dejó claro que, aunque está satisfecha con su cuerpo, seguirá cuidándolo y haciendo ejercicio, no solo por su aspecto, sino por su bienestar físico y mental. Con su hija Emma creciendo rápidamente, los dolores de espalda se han vuelto una constante, ¡y mantenerse en forma es más necesario que nunca!

Cerrando su reflexión, María Castro recordó a sus seguidores que ni los cuerpos ni las relaciones de pareja son iguales después de tener hijos, pero eso es parte de formar una familia, lo que realmente importa. "Ni los cuerpos después de parir son los mismos, ni el descanso nocturno es igual, ni la vida en pareja es la misma... Pero ahora somos una FAMILIA, ¡y eso es lo que cuenta!".