Humphrey Bogart: El rey de la nueva generación de galanes
Humphrey Bogart
¿Sabías que...?
- El perro de Frank Sinatra. Humphrey Bogart y Frank Sinatra eran buenos amigos, pero una vez tuvieron un pequeño incidente. Sinatra tenía un perro salchicha que adoraba, pero una noche, después de una fi esta, el perro desapareció. Al día siguiente, Bogart llamó a Sinatra para decirle que había encontrado al perro… ¡durmiendo en su cama!
- Su amor por los barcos. Era un apasionado de la navegación. De hecho, tenía un yate llamado “Sluggy” (apodo que usaba con su esposa Lauren Bacall) y disfrutaba pasando su tiempo libre en él. Su amor por los barcos era tan fuerte que incluso cuando estaba filmando, a menudo hablaba de ir a navegar después del trabajo.
- Tenía un gato llamado Sluggy con Lauren Bacall. Ambos amaban a los animales y el gato se convirtió en parte de la familia y era conocido por aparecer en las fotos familiares y hasta en las entrevistas.
Lo conocerás
Por su icónico papel en Casablanca. Humphrey Bogart (1899-1957) fue un actor estadounidense considerado una de las grandes estrellas del cine clásico de Hollywood por su distintiva voz grave, su presencia en pantalla y su habilidad para interpretar a personajes duros y complejos.
Del teatro a Hollywood
Bogart comenzó su carrera en el teatro y luego pasó al cine en la década de 1930, interpretando principalmente papeles secundarios y villanos. Sin embargo, su gran salto al estrellato ocurrió con la película El halcón maltés (1941) y después con Casablanca (1942) cuando su fama se afianzó.
Un héroe cínico y solitario
Considerado una de las figuras más influyentes del cine, Humphrey Bogart ha inspirado a generaciones de actores por su estilo y trayectoria. Su imagen como el héroe cínico y solitario se convirtió en un arquetipo en el cine de Hollywood. Su última película fue Más dura será la caída (1956), antes de morir de cáncer de esófago a la edad de 57 años.
A la cuarta va la vencida: Lauren Bacall
El actor estuvo casado cuatro veces, aunque su amor verdadero fue Lauren Bacall. Se conocieron durante el rodaje de la película Tener y no tener (1944) y se casaron en 1945, a pesar de que Bogart tenía 45 años y Bacall solo 20. Permanecieron casados hasta la muerte de Bogart en 1957. Tuvieron dos hijos juntos: Stephen Humphrey Bogart y Leslie Howard Bogart.
Su momento estrella
Fue en Casablanca (1942) cuando su fama se afianzó con el papel de Rick Blaine, un propietario de un café en Marruecos durante la Segunda Guerra Mundial. Esta película consolidó su estatus como una leyenda del cine y le permitió mostrar su carisma y profundidad emocional. La famosa escena final, en la que su personaje decide sacrificar su amor por Ilsa (interpretada por Ingrid Bergman) en favor de una causa mayor, es uno de los momentos más recordados en la historia del cine.
Activista por los derechos civiles
Aunque no era conocido por su activismo político, se manifestó en defensa de los derechos civiles y la libertad de expresión durante la era del macartismo. Formó parte de la Comisión de la Primera Enmienda de Hollywood, que se oponía a la caza de brujas del senador Joseph McCarthy y defendía a quienes eran perseguidos injustamente por sospechas de comunismo.
Las apuestas con Spencer Tracy
Ambos fueron grandes amigos, pero también eran conocidos por sus apuestas constantes. En una ocasión, apostaron una gran suma de dinero sobre si Bogart podría caminar de rodillas desde una habitación del hotel a otra. Aunque Bogart cumplió con el reto, terminó con las rodillas completamente magulladas.
Trabajos destacados
El sueño eterno (1946). Interpretando al detective Philip Marlowe, en una de las grandes películas del cine negro. La reina de África (1951). Por su actuación junto a Katharine Hepburn, ganó el Premio Oscar al Mejor Actor.
Cayo Largo (1948) y Tener y no tener (1944). En ambas películas, compartió pantalla con Lauren Bacall, con quien se casó y formó una de las parejas más famosas de Hollywood.
¿A qué no lo sabías?
A pesar de consolidarse como un actor duro y cínico, tenía mucho sentido del humor
Era muy bromista. Su humor ácido era famoso en los sets de rodaje. Durante la producción de La reina de África (1951), junto con John Huston, se dedicaba a gastar bromas a su compañera de reparto, Katharine Hepburn. Mientras ella se preocupaba por el agua potable y las enfermedades en África, Bogart fue prácticamente el único en el equipo que no cayó enfermo durante el rodaje en África. De esta forma, y mientras muchos sufrieron problemas estomacales por las difíciles condiciones higiénicas, Bogart bromeaba diciendo que su “dieta” a base de whisky y alimentos enlatados lo mantuvo saludable.
ANECDOTARIO
- Ceceaba. Concretamente, por una cicatriz en el labio superior, provocada durante su tiempo en la Marina de los EE. UU. Algunos dicen que fue por un fragmento de metralla, mientras que otros confiesan que fue por una pelea con un prisionero.
- Esta cicatriz afectó su forma de hablar y le dio un aspecto duro y cínico que marcó su fama.
LA FRASE
"Siempre nos quedará París".
(Dijo el actor en su papel de Rick Blain, en la película ‘Casablanca’).
- No era la primera opción para Casablanca. Los directores de cine pensaron en él después de que Ronald Reagan y George Raft rechazaran el papel.
- Miedo atroz a los aviones. A pesar de su imagen de tipo duro y aventurero, Bogart tenía un gran miedo a volar. Siempre que podía, evitaba los viajes en avión y prefería usar otros medios de transporte, como el tren o su barco, para moverse de un lugar a otro.
