CIENCIA
La CE plantea debatir excepciones para permitir el reconocimiento facial
Dentro de su estrategia digital para los próximos años
La Comisión Europea (CE) dio a conocer este miércoles su estrategia digital para los próximos años, que incluye una consulta pública sobre cómo desarrollar de forma segura la inteligencia artificial y debatir las excepciones en las que podría permitirse el reconocimiento facial.
"Queremos que la transformación digital dé poder a nuestra economía (...) La inteligencia artificial no solo mejora nuestras vidas sino que la UE es líder en esa área", recalcó la presidenta de la CE, Ursula von der Leyen, ante la prensa, al presentar las iniciativas.
La política alemana recalcó que la UE quiere "atraer más de 20.000 millones de euros al año para invertir" en inteligencia artificial.
La Comisión quiere que los europeos puedan "confiar" en la inteligencia artificial, un área "compleja" y que puede implicar "riesgos significativos en ciertas áreas", según reconoce, por lo que habrá que dotarle de "normas claras" y "más estrictas" en lo que se refiere a la protección de los consumidores para lidiar con prácticas comerciales desleales y proteger los datos personales.
La salud o el transporte son áreas en las que la inteligencia artificial puede tener un impacto de "alto riesgo", de manera que su uso debe ser "transparente, poderse rastrear y garantizar la supervisión humana", consideró.
Además, en su opinión, las autoridades deben poder comprobar y certificar los datos utilizados por los algoritmos, y es necesario contar con "datos imparciales" para garantizar el respeto de los derechos fundamentales, en particular la no discriminación.
La CE recuerda que actualmente el reconocimiento facial a través de reconocimiento biométrico remoto está "generalmente prohibido y solo puede utilizarse en casos excepcionales, debidamente justificados y proporcionados", sujetos a "salvaguardas basadas en leyes de la UE o nacionales".
Así, pretende recabar opiniones sobre en qué circunstancias, si las hay, podrían justificarse tales excepciones.
"La inteligencia artificial debe servir a la gente y debe cumplir siempre sus derechos", subrayó Von der Leyen.
Por lo que se refiere a las aplicaciones de inteligencia artificial "de bajo riesgo", la Comisión contempla un esquema de etiquetado voluntario para las que apliquen altos estándares de seguridad.
Para el desarrollo de esta tecnología, Bruselas apunta a asociaciones entre el sector público y privado y crear los incentivos adecuados para incluir también a las pymes.
La Comisión también dio a conocer hoy una hoja de ruta para crear un "verdadero espacio europeo de datos", un "mercado único de datos", a fin de liberar datos que no se utilizan y dejar que fluyan libremente en beneficio de empresas, investigadores y administraciones públicas.
Para que eso sea posible la CE tendrá que presentar el marco regulador adecuado sobre gestión, acceso y reutilización de los datos entre empresas, empresas y administraciones públicas y entre administraciones, lo que implica crear incentivos para compartir información y establecer reglas prácticas de acuerdo a la protección de los datos personales o las normas de competencia.
La CE presentará este año un acta de servicios digitales que establecerá normas claras para que las empresas accedan al mercado único, reforzar la responsabilidad de las plataformas en línea y proteger los derechos fundamentales.