Nealia: transformando el mundo ganadero

La innovación tecnológica está revolucionando sectores que a menudo se consideran tradicionales, y Nealia, una spin-off del Grupo Vall Companys, es un claro ejemplo. Recientemente galardonada con el Premio Catalunya Impacta, esta empresa está demostrando cómo la digitalización puede modernizar la ganadería y hacerla más sostenible y atractiva. 

Antes de seguir, tenemos que explicar qué es una spin-off. No es nada más que una empresa creada a partir de otra entidad mayor, a menudo una universidad, un centro de investigación o una empresa consolidada, como es el caso, para desarrollar y comercializar productos o tecnologías innovadoras, a menudo relacionadas con los campos de la empresa de origen.

El reconocimiento a una visión transformadora

El Premio Catalunya Impacta, otorgado por la asociación del mismo nombre, reconoce proyectos innovadores en ámbitos sociales y medioambientales alineados con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la ONU. En la categoría de sector primario, Nealia ha sido premiada por su impacto en la digitalización del sector agroalimentario y ganadero-cárnico.

“Nuestra apuesta por tecnologías avanzadas responde al compromiso de incrementar la competitividad y eficiencia, promover el bienestar animal y facilitar el día a día de los ganaderos”, afirma Lluís Castarlenas, responsable de Nealia. Este galardón pone en valor la tarea de Nealia para democratizar el acceso a la tecnología, ofreciendo soluciones que hacen el sector más resiliente, sostenible y eficiente.

Granjas conectadas: hacia la Granja 5.0

Nealia sigue el movimiento puesto en marcha con la Granja 5.0, una iniciativa del Grupo Vall Companys de la cual hablamos en este mismo reportaje. La compañía ha hecho de la Granja 5.0 su banco de pruebas en cría porcina, equiparable a lo que el “túnel del viento” es para la aerodinámica y la velocidad. Con esta herramienta, recoge información sobre análisis veterinario, nutrición animal y control ambiental mediante el big data y la inteligencia artificial. Les datos recogidos se agrupan y se analizan por los equipos de sistemas, nutrición animal y cría ganadera. Y finalmente, se escalan a la gestión de las granjas integradas, mejorando la operativa del primer peldaño de la cadena: la ganadería.

La estrategia de Nealia consiste en añadir capas de tecnología a las granjas ya existentes con una inversión inicial accesible básica, permitiendo a los ganaderos gestionar sus operaciones desde una aplicación en el teléfono móvil. “La misión es transformar granjas tradicionales en espacios conectados, donde tareas como controlar la temperatura, la ventilación o la alimentación se puedan supervisar automáticamente”, explica Castarlenas.

Soluciones innovadoras para un sector tradicional

Entre las herramientas desarrolladas por Nealia destacan los sistemas de sensores y gadgets IoT (Internet of Things), que permiten monitorizar variables ambientales como la temperatura, la humedad y el CO2 en tiempo real. Esta tecnología no sólo optimiza el consumo energético, sino que también alerta sobre posibles incidencias gracias a sistemas de alerta temprana. “hemos implementado sistemas de pesaje automático con visión artificial en granjas avícolas y trabajamos para aplicarlos en el sector porcino”, detalla Castarlenas. Estas tecnologías permiten contar y controlar el peso de los animales con una precisión increíble, reduciendo márgenes de error y mejorando la trazabilidad.

El impacto de la inteligencia artificial

La inteligencia artificial (IA) juega un papel central en los avances de Nealia. Sus sistemas analizan variables internas y externas para ajustar automáticamente las condiciones de la granja, optimizando el clima, la ventilación y la alimentación de los animales. “La IA libera a los ganaderos de tareas repetitivas, permitiéndoles centrarse en aspectos estratégicos de la gestión”, destaca Castarlenas. Este enfoque tecnológico también contribuye al bienestar animal, un elemento clave en la visión de Nealia. Les suyas herramientas aseguran que las condiciones de las granjas cumplan con las estrictas regulaciones europeas, garantizando la sostenibilidad y la rentabilidad.

La digitalización como solución al relevo generacional

Uno de los retos más importantes del sector ganadero es la falta de relieve generacional. Tradicionalmente, la gestión de una granja ha sido una tarea dura y poco atractiva para las nuevas generaciones. “Queremos hacer que este trabajo sea más eficiente y económicamente viable para los jóvenes”, señala Castarlenas. Las tecnologías de Nealia permiten a los ganaderos gestionar un mayor número de granjas con menos esfuerzo, abriendo la puerta a un futuro en que el sector pueda competir con otras industrias por el talento joven. “El ganadero de la mañana podrá ganarse mejor la vida y tener una calidad de trabajo superior”, afirma.

Nealia como motor de colaboración

A pesar de ser una spin-off del Grupo Vall Companys, Nealia opera como una start-up independiente con tres divisiones principales: inventores, que desarrollan nuevas tecnologías; product owners, que gestionan y evolucionan los productos; y customer success, que aseguran el mejor apoyo a los clientes. Este modelo organizativo ha permitido a Nealia colaborar con otras empresas, incluso competidoras, para comercializar sus soluciones. “Si podemos venderles nuestra tecnología, quiere decir que es un buen producto”, reflexiona Castarlenas.

El camino hacia el futuro

Nealia ya domina la ventilación y los sistemas de climatización, y ya ha empezado a trabajar en nuevos proyectos como la gestión automática del agua y la alimentación, dos prioridades críticas y muy sensibles para el sector, ya que una deficiencia o falla sería catastrófico para toda la población animal de una granja. “También estamos investigando cómo utilizar la visión artificial para el pesatge de animales en el sector porcino”, explica Castarlenas. Estas innovaciones podrían transformar todavía más la manera como se gestionan las granjas.

Con el Premio Catalunya Impacta a su haber, Nealia refuerza su compromiso con un sector que, históricamente, ha sido poco tecnificado. Este reconocimiento es un aval a su trabajo para modernizar el campo, hacerlo más competitivo y ponerlo al alcance de las generaciones futuras. “Nuestra misión es clara: hacer la vida del ganadero más fácil y hacer que el sector primario siga siendo un pilar fundamental de la sociedad”, concluye Castarlenas.